Camila Pov.
Llegue lo más rápido posible a la empresa de mi novia y su amiga, salude a todos los empleados como siempre y me dirigí a la oficina que ocupa Lauren, para mi buena suerte aún no llegaba el contratista.
Espere 20 min más entreteniendome con algunos asuntos que habían quedado pendientes y que vero aún no se encargaba de ellos, firme algunos documentos a nombre de Lauren para sesiones de fotos y estuve observando fotos que estaban archivadas en la computadora de algunas modelos, por un momento estuve pensando en lo hermosas y bien formadas que estaban esas chicas, más que yo, pensé. Después encontré otra carpeta en donde decía "prohibido❤️" me gano la curiosidad y abri esa carpeta, me sorprendí cuando vi que eran fotos de mi distraída y otras estando las dos. "esa chica me ama tanto como yo a ella" pensé. Me dolía el rostro de la sonrisa que tenía, parecía una idiota.
El teléfono de aquella oficina me sacó de mis pensamientos cuando empezó a sonar, era la asistente de mi chica y mejor amiga nuestra, Ally.
-Mila, ah llegado el contratista. ¿Lo hago pasar?- hablo desde la bocina del teléfono.
-Por favor Ally- contesté amablemente.
En cuestión de segundos la puerta se abrió y vi la cara de mi amiga pálida, como si quiera decirme algo, pero no pudo.
-Pasa por favor-hablo mi amiga al contratista.
-Gracias All- la voz masculina se escucho.
La voz me sonaba familiar. No tome mucha atención, seguía mi mirada fija en la computadora de mi novia.-siéntese Porfavor, en un momento lo atiendo--dije aún distraída en la computadora.
-Vaya, eres tú camila? Camila Cabello?-
Voltee está vez y era... Él?
-Shawn?- dije incrédula.
Era él, con su sonrisa de siempre, sincera, no había cambiado en nada, guapo, alto, de tez blanca.Narrador.
Mientras tanto en el departamento, Lauren y Lucy seguían con sus clases de braille para el tiempo que llevaba tomando clases la ojiverde ya sabía utilizar las hojas y libros en braille.
La relación entre amigas de ambas chicas empezaba a crecer día a día, a excepción de Lucy, nunca había dejado de querer a la ojiverde, sin embargo trataba de superarlo sin obtener resultado alguno.-Y bien, Laur, como vas con camila, todo bien en su relación?- cuestionó la castaña.
-De maravilla Lucy, antes de que tuviera este accidente y de quedar así, tenía planeado pedirle matrimonio--contestó la ojiverde mirando hacia la nada.
Por su parte, la castaña estaba boquiabierta, no sabía que responder ante tal confesión, sintió un nudo en la garganta. No contestó.
-Estas ahí Lucy?- hablo nuevamente la ojiverde.
-Si, sólo que estoy sorprendida, estas segura?-
-Claro yo la...- fue interrumpida por el timbre del departamento. Rápidamente Lauren se levantó del sofá y busco su bastón para dar pasos algo torpes a habrir la puerta.-