Algo está cambiando

2.6K 255 229
                                    

14 Julio: Algo está cambiando 

Las pesadillas se volvieron intermitentes. Extrañas imágenes aparecían frente a mí. Lugares en los que no recuerdo haber estado, pero que de alguna forma me resultaban bastante familiares.

 Lugares en los que no recuerdo haber estado, pero que de alguna forma me resultaban bastante familiares

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

No podría decir que eso era lo mejor. Se sentía como una verdadera ruleta rusa. Algunas noches pasaban sin novedad, sólo cerraba los ojos dejando que la oscuridad y mi inconsciente actuaran hasta que sonara la alarma. Para mi desgracia, esas noches eran las más escasas. 

Ya no sé cuántas veces desperté en plena madrugada, de golpe, entre quejidos, gritos y sudor frío. Esa inconstancia me enloquecía, comencé a acumular cansancio, apenas si tenía las energías para levantarme por las mañanas y se volvió algo evidente. 

Adopté casi como un habito el quedarme dormido en clases. Si no es por Larry, quien me despertaba cuando ya no podía evadir la mirada de los profesores, probablemente en más de una ocasión habrían citado a mi padre o como mínimo, habría sido un día en detención. 

De vez en cuando pedía pases para ir al baño. Una vez ahí, y asegurándome de que nadie estuviera por los rincones, retiraba la prótesis lanzándome un chorro de agua fría directamente en el rostro, en un burdo intento por despabilar.

La gota que rebalsó el vaso fue cuando me quedé dormido luego de rendir un examen. No creí tener el sueño tan pesado como para no sentir a Larry intentando despertarme. Los minutos pasaron y parecía estar en estado de coma tendido en mi banco. El castaño me excuso diciendo que "estaba un poco enfermo", y antes de irse cubrió mi espalda con su polerón, dejándome dentro de la sala cuando todos salieron a la clase de educación física. 

Al abrir los ojos no había nadie a mi al rededor. 

No se escuchaba ningún ruido, ni los gritos de los profesores en las salas aledañas, las risas de los chicos, los murmullos o los pasos en el pasillo. Miré por la ventana: el cielo cubierto de un rosado rojizo, sin sol, ni nubes, yacía afuera. Los árboles permanecían estáticos, dándome a entender que ni siquiera la brisa me acompañaba en esos momentos. Parecía, de algún modo, que yo era el único ahí. 

 

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Because you didn't look away (Sally Face)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora