En Otra Vida | Axl Rose.

Capítulo 29

Mi pecho retumba con fuerza, mis manos se hacen un nudo de dedos entre la base de mi cadera y creo que quiero temblar, estoy temblando, no lo sé.

Axl Rose me observa con una cautela tan abrumadora, que me pone jodidamente nerviosa. Tanto, que quiero gritarle que deje de mirarme y salir corriendo como estúpida para huir lejos de sus ojos. De su imponente presencia.

¿Qué malditos demonios hace aquí? ¿Cómo llego? ¿A que hora? ¿Porqué?

El esmoquin que lleva puesto casi me deja sin aliento por momentos. Tiene el cabello agarrado en una coleta un tanto despeinada y su barbilla perfectamente afeitada lo hace ver mucho más joven aún.

-Oh, cielos -murmura una voz en las espaldas del chico frente a mi, y no tardo demasiado en darme cuenta de que se trata nada más y nada menos de Saul Hudson.

Mis ojos se vuelven a abrir en sorpresa, joder, ¿Ahora quien va a salir? ¿Freedy Mercury? ¿Kurt Cobain?

Sus mirada se encuentran con la mia en el segundo y este me sonríe un poco nervioso de inmediato, también lo veo con un esmoquin puesto, y es la primera vez que veo sus ojos. Se ve tan extraño que se vea asi de arreglado.

- ¡Erin! -exclama en un saludo amistoso-. Hola, ¿cómo estas? -Axl gira su vista para mirarlo, y hay un ceño fruncido en su expresión justo ahora. Yo me dedico a sonreírle ligeramente, aunque no tengo muchas ganas de hacerlo-, estuviste maravillosa alla afuera, espectacular, Axl no dejaba de babear por ti.

Oh, mierda, esto debe ser una broma.

Me quedo callada, no digo absolutamente nada, pero ahora mismo estoy sintiendo como el rubor se expande con rapidez por toda la extensión de mi rostro, hasta el punto de sentirme hecha un tomate. Y claro, sin contar que mi corazón se ha acelerado un poco más de la cuenta.

Me vio, maldita sea me vio, ¡él me vio!

¡Ya, ya sabemos! Cállate.

Oh vaya, eres tú otra vez, no te extrañaba por cierto.

Mi vista cae sobre el pelirrojo en menos de dos segundos y lo observo, éste a cerrado los ojos por completo, mientras soba de su frente con una de sus manos.

Al parecer, creo yo, que luce apenado.

Pues si, ya descubrieron que te acosaba.

¿Acosarme? ¿Axl me acosa?

- ¿Ella es tú novia? -la voz de Michael, inunda mis oídos y rápido volteo a encararlo. Me percato de que la pregunta va dirigida a Axl y yo, sin pensarlo ni un momento, comienzo a negar con la cabeza, con aire asustado.

-No, no -volteo de nuevo hacia el frente, topándome con los ojos del pelirrojo-, por supuesto que no.

- ¿De verdad? -esta vez, el rubio a mis espaldas suena sorprendido y sin mirarlo, asiento a su pregunta.

-Eso a ti no te importa, ¿no lo crees? -escupe el pelirrojo en su dirección, claramente sin una pizca de amabilidad en su tono.

-Necesitaba saberlo.

- ¿Ah si? ¿para qué?

-Basta, Axl, aquí no -Saul le mumura hacía él, pero fui capaz de escucharlo a la perfección, y sé que Michael también.

No entiendo una mierda, pero me siento muy incómoda ahora.

- ¿Cómo sabias que ella estaría aquí? ¿Ya tenías planeado verla también? -mi ceño se frunce en confusión de inmediato, ¿El rubio tenía planeado verme? ¿Qué mierda pasa?