Los dos actores habían llegado a la casa de Evans, éste se había asegurado de que la cena fuera muy romántica y de que todo saliera bien.
Entraron a la casa y Chris se ofreció a servirle de una vez la comida pero Robert se negó, dijo que estaría bien tomar un baño primero después de todo había traído un cambio de ropa extra.
Chris no se negó, le dijo que podía usar el baño de huéspedes y así fue. En cuanto Robert se metió al baño, el rubio se olió a sí mismo, Downey tenía razón un baño no haría daño, subió a su habitación y se bañó lo más rápido posible, tenía que ducharse antes de que Robert saliera.
—Oh... —se detuvo al pensar que Robert se estaba bañando. —No te desvíes... Termina de ducharte y luego lo que venga... —se dijo y es que comenzó a tener pensamientos inadecuados con respecto a su pareja.
No tardó ni diez minutos en bañarse, se cambió lo más rápido y decente posible, caminó hacia la cocina y comenzó a servir la cena en la mesa antes de que Robert llegara.
Escuchó como su perro ladraba. —Esto es importante... ¿Podrías ayudarme? —le cuestionó a su mascota a lo que simplemente recibió un ladrido, observó como su mascota se iba por ahí, suspiró y se dispuso a terminar.
Esperó y esperó hasta que el castaño finalmente salió del baño, vio como entraba al comedor y de inmediato se puso de pie. —Te ves bien...
—¿Sabes? —Downey vio a Chris a los ojos con una sonrisa demostrando un poco de incomodidad. —No sé cómo llamar a esto... Digo, nos bañamos en tu casa antes de tener nuestra cita... Que es aquí por cierto... —se rio.
—Bueno, así será rememorable para nosotros... —se rascó la nuca, no sabía qué hacer y cada vez estaba más nervioso. —¿Comemos?
—Me parece buena idea... —el más bajo caminó a la mesa y se sentó a lo que el rubio hizo lo mismo, ambos quedaron de frente, lo gracioso era que ni uno ni el otro sabía qué hacer.
La cena pasó sin más, los dos comieron en silencio y poco a poco el ambiente se tensaba. —Lo arruiné ¿Verdad? —Chris bajó la mirada decepcionado de sí mismo. —Scarlett tenía razón... Siempre termino por arruinar nuestras citas...
Robert al instante sonrió con ternura, ese rubio lo volvía loco. —No digas eso... No lo arruinaste... Solo estoy un poco nervioso... Pero de ahí en más está todo bien.
—Pero...
—Fueron los nervios ¿Vale? Tanto tú como yo estamos nerviosos, nunca hemos tenido una cita más allá de la amistad y ahora que somos algo más es normal estar así... Creo. —animó al rubio.
—Creo que tienes razón... —se relajó.
—¿Pero, por qué dices que lo arruinaste?
—Porque siempre que me invitabas a tomar o alguna otra cosa lo arruinaba... Eran mis celos, odiaba que le prestaras más atención a otra persona. —se burló de sí mismo. —Como aquella vez en donde te dejé plantado...
—O aquella vez en donde me tiraste por “error” el jugo encima mío. —sonrió de recordar esa escena. —O esa vez donde casi me rompo la maiz (léanlo sin acento) porque me golpeaste de verdad cuando estabamos en una escena de pelea, resbalé y caí de dos metros de altura... O quizá cuando... —fue interrumpido por Evans.
—Por favor, no sigas... —se deprimió. —es frustrante...
—Pero fue divertido. —Robert se encogió de hombros.
—¿Divertido? —Chirs vio a Downey a los ojos. —Dejaste de hablarme en cada una de ellas... Tenía que llevarte doritos para que me perdonaras... —su piel se tornó roja.
—Seee... Y no me arrepiento de nada, valió la pena. —de burló Robert.
—Pero muchas fueron culpa de Cumberbatch... Estás muy apegado a él. —dijo serio.
—Es que adoro a ese hombre... Soy fan de él... Hasta tengo un póster suyo en tanga. —Downey se rio, era divertido jugar de esa forma, aunque sabía en cierta forma que Evans era muy crédulo.
—¡¿En serio?! —no daba merito a lo que escuchaba.
—Un día te lo mostraré... —se carcajeó el menor. —Tal vez algún día pueda llegar a ser fan de ti y tener un póster tuyo completamente desnudo. —dijo pícaro. —¿Qué opinas?
—Bue-bueno... Si con eso quitas a Cumberbatch me doy por bien servido. —desvío la mirada con vergüenza.
—Por cierto... Tengo una duda. —Robert se levantó de su asiento y caminó hasta Evans, se puso en frente de él y sin pena alguna besó a su amado.
Se separaron del beso y Chris sabía más o menos el rumbo de la pregunta. —¿Cuál duda?
—Mark me preguntó quién sería el pasivo y quién sería el activo... ¿Cómo crees que sea? —mencionó meloso Robert.
—¿Quieres averiguarlo? —Evans colocó sus manos alrededor de la cintura de Robert.
—Sabes que sí... —finalizó RDJ.
