Randy Cunningham Ninja Total: El verdadero rival.[EN REVISIÓN]

Prologo: Nuevos Enemigos

En la oficina de Hannibal McFist, este se encontraba gritando mientras golpeaba y tiraba todo aquello que encontraba por la oficina.

McFist: ESE MALDITO NINJA LO ARRUINO TODO. Ahora que el Brujo no está jamás obtendré mi deseo.

Viceroy: ¿Y qué es exactamente lo que iba a desear señor? – Preguntó Viceroy en un tono sarcástico. –

McFist: Pues iba a pedir ... Lo que yo quería era ... –McFist no sabía qué decir había pasado tanto tiempo ocupado, planeando destruir al Ninja que ni siquiera había tenido tiempo para pensar su deseo. –

McFist: Eso ahora da igual. – Dijo McFist mientras ocultaba su vergüenza por no haber pensado en ningún deseo. – AHORA LO IMPORTANTE ES DES...

De repente una explosión la cual voló la puerta del despacho de McFist lo cual interrumpió el discurso de McFist. Y un montón de Robo-Gorilas salieron por los aires provocando que McFist y Viceroy se ocultaran asustados detrás de la mesa de McFist.

Robo-Gorilas: Cuidado. Peligro. Amenaza detectada. Imposible detener... laaaa. –Decía uno de los Robo-Gorilas que cayó destrozado cerca de McFist y Viceroy. –

Cuando vieron este espectáculo unos aterrados McFist y Viceroy se lanzaron a ocultarse tras la mesa que tenía McFist en su oficina.

¿?: Perdón por interrumpirlos pequeños. Pero creo que estaban a punto de decir que querían destruir al Ninja. –Dijo una voz la cual provenía del humo de la explosión. –

Entre el humo unos asustados McFist y Viceroy pudieron reconocer la silueta de lo que parecía ser una mujer mayor. Cuando la silueta avanzó lo suficiente como para que el humo no la ocultara, lograron distinguir lo que parecía ser una versión femenina del Hechicero.

McFist y Viceroy: ¿Quién eres tú? –Preguntaron los dos aun con el miedo recorriendo todo el cuerpo. –

¿?: Que no. Quien. Soy la Hechicera aquella que estaba destinada a gobernar este mundo junto a mi amado hechicero. –Dijo la Hechicera con un tono apenado y un gesto de tristeza en su rostro. –

McFist: Perdone, pero creo que se equivoca el que iba a gober... –McFist intentó corregir a la Hechicera, pero este fue silenciado por la Hechicera. –

Hechicera: SILENCIO INSOLENTE. –Grito la hechicera silenciando a un aterrado McFist en el acto. –

McFist: Sí señora. –Dijo McFist con una voz aguda debido al miedo que le provocaba el poder de la Hechicera y su aspecto. –

Al escuchar la Hechicera a McFist llamándola señora esta le hecho una mirada amenazante. Pero después hizo un gesto con su mano, y su cuerpo fue cubierto con una niebla mágica la cual cuando se disipó provocó que la Hechicera adoptase la apariencia que adopto una vez para infiltrarse en la escuela Norrisville.

Hechicera: Así está mejor. –Dijo la Hechicera con un tono de satisfacción. –Ahora no quiero volver a oír la palabra señora, me hace sentir vieja. ¿Entendido? – Preguntó la Hechicera en tono amenazante. –

McFist: Si, seño... –Antes de que pudiese acabar la frase Viceroy le tapó la boca a McFist para que su bocaza no volviera a ofender a la Hechicera y los pusiera en peligro de nuevo. –

Viceroy: Entendido. O Gran Hechicera. –Dijo Viceroy intentando corregir el error que McFist estuvo a punto de cometer. –

Ante el gesto de que Viceroy lo callara tapándole la boca McFist se sacó la mano de Viceroy de la boca con gesto de desagrado. McFist se calmó antes de dirigirse a hablar con la Hechicera, y una vez calmado decidió preguntarle.

McFist: ¿Y porque has decidido aparecer ahora? –Ante la pregunta de McFist la Hechicera quedó confundida no sabía qué quería decir aquel hombre. – Digo si se supone que eres la compañera del Hechicero ¿porque no estabas con él para ayudarle a destruir al Ninja?

Hechicera: Porque el Ninja logró encerrarme en el Mundo de las Sombras y debido a eso no pude apoyar al Hechicero en la destrucción del Ninja. –Dijo la Hechicera con una gran frustración. – Pero debido a los problemas provocados en el Mundo de las Sombras por ese patético aspirante a Hechicero pude escapar. Y ahora por fin tengo la forma para destruir al Ninja.

Al mismo tiempo que la Hechicera decía estas palabras sacaba una de las esferas del Hechicero a la cual miraba con satisfacción. McFist y Viceroy no salían de su asombro al ver que tenía una de las esferas del Hechicero.

Viceroy: Esa es una de las esferas del hechicero. – Pregunto Viceroy con asombro ya que el Ninja las arrojó a la prisión del Hechicero, la cual solo el Ninja podía abrir. – ¿Pero el Ninja no se deshizo de ellas?

Hechicera: Eso es lo que el Ninja pensó, pero pude recuperarlas. Y contenido dentro de estas esferas se encuentra el poder del Hechicero el mismo poder que utilizare para destruir al Ninja.

McFist: Ya ya. ¿Pero yo qué saco con destruir al Ninja? –Pregunto McFist con intención de hacer un trato con la Hechicera. –

Hechicera: Si me ayudas te entregaré el suficiente poder para destruir al Ninja y gobernar el mundo.

McFist: No se hable más. ¡¡VICEROY PREPARA LOS ROBOTS!! –Dijo mientras señala a Viceroy para que se pusiera a organizar a los robots. –

Viceroy con gesto de resignación se dirigió al panel de control para organizar a los robots. Pero este fue detenido por la Hechicera.

Hechicera: Aun no. Aún faltan piezas para completar mi plan. Además, los robots que tenéis aquí no podrían hacerle frente al Ninja. Pero con mi ayuda podrían tener una oportunidad para que llevemos a cabo nuestro plan. –Dijo la Hechicera con una sonrisa diabólica. – Pero pronto, muy pronto destruiré al NINJA. JAJAJAJAJAJA.