16 de agosto del 2017
Me encuentro en una habitación a oscuras, no logro distinguir absolutamente nada. Escucho unos pasos que se acercan cada vez más hacia mí, estoy asustada, no se qué hacer, no sé si decir algo o gritar y así me escuche alguien. Pero no sé en dónde me encuentro, solo recuerdo que ese hombre me puso algo en mi nariz y solo me dormí.
Los pasos llegan a su fin y con ello se abre la puerta con un rechinido estruendoso, solo veo su sombra, se acerca hasta la esquina en donde me encuentro, no puedo decir nada, solo escucho mi respiración pesada y la suya tan liviana.
—Hola, bonita.— comienza hablar, su voz es grave y suave a la vez — Eres tan linda y frágil — estiró su mano hacia mí, para tocar mi rostro, su acción me dio miedo, no sé si él me hará daño o para que me quiere aquí.
—¿Porqué estoy aquí? — pregunté con mi voz entrecortada y mi boca seca, como si no hubiera tomado agua desde hace tiempo.
—¿Porqué estás aquí?, es simple. Porque eres mía —Lo dijo con una sonrisa en su boca que me puso más nerviosa y desperté.
Me levanté de mi cama con mi cuerpo sudoroso, fui a la mesita de noche que está en mi cuarto y veo que son las 6:50am. Buena hora para levantarme y hacer un poco de ejercicio.
Después de hacer ejercicio, desayunar y hacer mis deberes en la casa como siempre, voy hacia el cuarto de baño a ducharme. Al bajar de las escaleras ya bañada y cambiada con mi uniforme, voy directo hacia la cocina a servirme mi comida que hice. Al terminar de comer le dejo preparado a mi madre su comida.
Voy hacia la puerta principal y antes de cerrar veo el en la mesita que tenemos cerca de la puerta aquella fotografía con mis hermanas y mi hermano, me encantaba cuando éramos niños y no había dolor o peleas en la familia, pero ahora solo somos mi mamá y yo, solas, por ahora.Corrí directo a la parada del camión, no se me vaya a pasar de nuevo, al llegar solo esperé 5 minutos para que llegará y al subirme en el autobús e irme a los asientos traseros me puse mis audífonos para escuchar un poco de Aurora, mi cantante favorita del momento. No pasaron 15 minutos y ya estaba bajando del camión, la escuela no se encontraba tan lejos de casa. Camine una cuadra para llegar y al entrar a la escuela pase por los edificios que lo conformaban y fui directo a mi salón a tomar mi asiento de siempre.
Pero al llegar a mi lugar y quitarme los auriculares pude poner atención a mi exterior, vi que se encontraban a unas bancas a la izquierda de mi lugar un grupo de chicos del salón en donde iba, ellos se percataron de mi pero siguieron en su plática, pude ver como aquel chico que siempre me intimidaba por la atracción que siento por él, se encontraba con ellos, hablando y riendo, él volteó en mi dirección y rápidamente voltee mi cabeza hacia el lado derecho donde esta la venta.
—Hola, Joe.— escuché que me saludó desde la distancia.
—Hola, Daniel.— Le regrese el gesto con un levantamiento de cabeza y me volví a voltear.
Me coloque mis audífonos para disimular que no los escuchaba, esta táctica siempre me funcionaba, y comenzaron hablar.
—¿Alguno de ustedes ya ha tenido sexo?— pregunto el chico más estúpido de la clase llamado Ramón.
—Sí, ¿quién no? — contesto Jayr el amigo inseparable de Ramón.
—Obvio que ya todos hemos tenido sexo con alguna chica.— Contestó Daniel, y todos le dieron la razón a él.
—¿Alguien ya a dado el beso del payaso?— preguntó juguetonamente Jayr.
Todos soltaron una carcajada, ¿a qué se referían con el beso del payaso?, no entiendo esa referencia, ¿será algo sexoso o solo cosas de hombres?.
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Lo Peor De Mí
Mistério / SuspenseVuelvo abrir mis ojos después de un largo tiempo, siento un dolor en mi cabeza; como si me hubieran golpeado. Intento moverme pero no puedo, volteo a todos los lados de esta habitación, y solo veo oscuridad. Busco la razón por la que no puedo moverm...