Capítulo 8

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Narra Grecia:

Cuando me di cuenta de dónde estábamos, ya ambos estábamos desnudos.

Aguanté la respiración cuando lo senti hundirse en mi, apreté los ojos y enterré mis dedos en su espalda.

-Demonios-susurré.

El ni siquiera se detuvo un poco a pensarlo, a preguntarme cómo estaba. Tenía que ser idiota.

Sólo siguió embistiendo.

Sentí como los ojos se me aguaban por el dolor.

¡Enserio duele esto! ¡Duele!

Sentí sus gruñidos en mi oído.

Gemí de dolor, pero eso sólo hizo que él se excitara más.

Al principio sentí que esto podría ir bien, que podríamos disfrutarlo, que sería placentero como escuchaba a algunas mujeres no ha reservadas. Pero ahora sólo quiero que termine. ¡Quiero que acabe ya!

[...]

Hace horas que él duerme, con el pecho descubierto, tiene buen torso, la verdad

Intenté pararme y sin querer lo destapé... wow, ya entiendo por qué me dolió.Grecia deja tus pensamientos impuros y tapalo o se despertará y no estás para más de eso ,me dije mentalmente.

Lo tapé de nuevo y rápidamente me puse la bata.

Caminé hasta la cocina, la madera crujió bajo mis pies, así que me apuré en llegar a mi destino.

Puse agua en la tetera, encendi la cocina y dejé la tetera. Me apoyé contra la encimera y suspiré.

Qué acabo de hacer.

Hice lo que me prometi no hacer.

Esta no soy yo.

Qué me está pasando.

Caminé hasta la sala de estar y me senté levemente, arrugué la nariz cuando mi trasero dolió.

Mis hermanos... si estuviesen vivos esto no hubiese pasado, ahora estaríamos cenando, todos juntos, probablemente mi madre regañaría a mis hermanos por gritar y juguetear en la mesa, yo rodaría los ojos y me enfadaría, pero internamente daría las gracias por ser un día tan normal.

Sentí mi rostro húmedo, sólo ahí me di cuenta de que lloraba. No he llorado la muerte de mis hermanos.

Apenas vuelva a casa iré a verlos al cementerio, lloraré, gritaré y me lamentaré todo lo que no he hecho hasta ahora.

Ellos se merecen un par de días de llanto.

Se merecen ser recordados.

-¿Grecia?

Cerré los ojos. Oh Dios el .

-Estoy aquí-murmuré.

Caminé hasta la cocina y apagué la tetera. Me serví un té y aspiré el suave aroma.

Apareció en ropa interior en el umbral de la puerta, me sonrojé y me volteé.

-¿Me acabas de ver desnudo y ahora te sonrojas por verme en ropa interior?

Mordí mi labio y me volteé.

Camíné hasta nuestra habitación, pero volvi a sonrojarme al ver la cama manchada con sangre.

-Ah... no veas esto-empujé a Roman fuera de la habitación cuando lo sentí detrás mío. Dios que vergüenza.

-Oye, Grecia...-entró en la habitación-es totalmente normal, e incluso me pone feliz... porque eres mi mujer. Mia.-dijo con una sonrisa

Suspiré y dejé mi taza de té sobre la mesita de noche. Ese es el problema.

-Déjame sacar esto, lo lavaré...-murmuré.

[...]

La sábana quedó totalmente limpia luego de que la escobillara por horas. Pero al fin Lucia reluciente.

Luego de eso los días pasaron lentísimo, pasamos la mayor parte del tiempo recorriendo el lugar, pero no hubo más sexo... realmente no quería más, hubiese necesitado al menos dos botellas de vino más para volver a hacer eso.

El auto paró frente a la casa de mis padres.

-Ve a...

No lo dejé terminar y salí corriendo del auto, me lancé en los brazos de mi papá.

-Papi-lo abracé.

-Hijita...-acarició mi espalda-mi pequeña mujercita-sonrió y palmeó mi mejilla, miró a mis espaldas-Roman, que gusto verte, hijo.

-Lo mismo digo-asintió Roman.

-¿Y mamá?

-Está adentro, pasa-asintió.

Entré corriendo.

-¡Hola mamá abracé.

-Vaya, ¿Y ese entusiasmo?

-Pues te extrañé mucho-sonreí.

Estuve un rato hablando con ella hasta que Roman entró y saludó a mi madre.

-Tus cosas ya están listas, ordenaré a que las metan en el auto de Roman-sonrió.

-Tienes que venir conmigo...-suplíqué.

-Claro que no, hija. Es hora que comiences a vivir tu vida de casada. Pronto nos veremos, y espero que pronto me hagas abuela, antes de que se me noten las arrugas y me aparezcan canas.

Ni lo sueñes.

Mi padre entró.

Me lanzó la misma mirada que me daba cuando era más pequeña, esa mirada de "si te portas bien te ganarás un gran premio"

Pero no veía el premio acá si era buena esposa... pero si veía claramente lo que me ganaba si era una mala esposa. Y a la verdad no quería descubrir el porqué las mujeres usaban bastante maquillaje y no sólo para lucir hermosas .

[...]

Entramos en una gran casa, estaba oscura.

-Mañana viene de nuevo la ama de llaves, le había dado descanso en nuestra ausencia.

-No quiero a mujeres dando vueltas por mi casa-murmuré-una es suficiente.

Roman asintió.

-Con respecto a la seguridad no puedes decir nada, hay militares -se acercó un poco más a mi - y además tendrás al más fuerte  de todos durmiendo a tu lado .

A no ya sabía yo a donde quiere llegar con esto.

- Eh... Que hermosa está la casa podrías mostrarme como es -reí nerviosa.

-Habló enserio quiero que tu seguridad sea mejor que la del presidente.

Asentí con los labios apretados. Me quedó mirando.

-Y antes de mostrarte mejor la casa te advierto que es bastante grande .No quiero que te pongas paranoica con el número de habitaciones... es que ... ya te dije, quiero una familia grande.

Suspiré.

-Si, pero no pienses que la comenzaremos ahora.

- Claro que no te dije cuando tu quieras y el número que quieras - pensó un poco - solo asegúrate que ese número pasa por lo menos de tres.

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Inserte excusa aquí
A la verdad no lo había publicado por flojera no es como que estuviste ocupada sorry.😅😅😅👌

Dedicado a Guissel_little

1939Donde viven las historias. Descúbrelo ahora