Narra Grecia:
-Esto está muy bueno- murmuró Roman.
Le sonreí, él acarició mi mano y luego la besó. Tomé el diario que estaba frente a él.
-Pensé que lo leerías en el desayuno- murmuré.Me quitó el diario.
-Estaba.. corroborando información.- murmuró y me lo arrebato de las manos.
-¿Por qué me quitas el diario?
Se puso serio.
-Porque yo lo estoy leyendo.
-Déjame ver, Roman.
-Grecia, no tienes que ver esto.
Enserio
-Muéstrame.
Gruñó y me pasó el diario. Leí la portada.
"Miles de personas mueren día a
día en los campos de concentración
nazis"Junto al gran título había una
foto de unas personas en una fosa
común. Sentí náuseas.-Dios mío... ¿no pueden hacer nada por esas personas?
-Ahora no- murmuró Roman-ahora mismo, meternos en medio sería un suicidio seguro.
-Es casi navidad... y esas personas son asesinadas ahí... los niños, demonios...- me quejé.
-Tranquila- acarició mi mano- por eso no quería que vieras esto.
[...]
*meses despues*
-Buenos días- saludé al sacerdote.
-Señor y señora Vokanosh- asintió.
Pasamos a la iglesia y nos sentamos
donde acostumbrábamos.Acaricié mi gran panza.
Luego de ver el horrible encabezado de ese periódico decidí que todos los domingos vendríamos sin alta a la iglesia.
Alguien debe orar por esas personas... y por nosotros mismos.
Josephine se dio vuelta y me saludó
con entusiasmo, saqué mi mano de
mi panza y la saludé de vuelta. A su lado está su prometido, un estudiante de medicina.A veces me gustaría ser como ella, encontró al amor de su vida en una misa de domingo, y desde entonces no se han separado, lucen enamorados.
Nadie sabía mucho de él antes, es
decir, sabemos quien es, y quiénes
son sus padres. Pero en este pueblo no muchas familias tienen el reconocimiento que tiene mi familia y
la de Roman- a pesar de que a él no
lo conocía antes de casarnos- pero
todos saben que son personas muy
importantes, y todos hablan de lo
rápido que ha ascendido el capitán
Roman Vokanosh.[...]
Roman me ayudo a pararme, ahora
me cuesta mas sentarme sobre mis
rodillas y mucho más pararme.Pero debo hacerlo para orar.Ya no había casi nadie en la iglesia.
Me enganché del brazo de Roman
y caminamos juntos fuera de la
iglesia. Bufé fuerte y me quejé al sentir
una fuerte presión en mi panza.-¡Este pequeño panquecito aún no
quiere salir!- exclamó Josephine.-Juró que me parte la espalda- gruñí.
Ludwig y Roman se dieron la
mano.-Deberías quedarte en casa desde
ahora- murmuró Ludwig- no vaya a ser que rompas bolsa en el camino.-Si, creo que sería mejor- murmuré.
-El tiempo ha pasado muy rápido-
murmuró Jo- sólo mírate. Pareciera
ayer cuando me dijiste que te ibas
a casar, y ahora serás madre..Suspiré.
-Deberían ir a cenar... esta noche- dijo Roman. Se que lo dijo para aliviar un poco la situacion y se lo agradezco.
-Llevaré vino- asintió Ludwig.
[...]
Cuando Roman se convirtió en capitán, dejó la habitación que había en el primer piso como despacho. Ahí tiene documentos y cosas que tengo prohibido tocar, es más, no debo entrar ahí sin su autorización.
Aún así, Roman invitó a Ludwig a
su despacho.-Y... ¿No has sabido más del otro?
-¿Qué otro?- fruncí mi ceño.
-Johnny. o Jhonatan.
-Oh, John. no, lo último que supe fue que está en la base militar de Pearl Harbor.
-Pearl Harbor... amiga, ese bebé si es de Roman, ¿verdad?-Obvio que si... con John no pasó nada... solo atracción. Nada más.
-Amiga.
-Te lo juro. No se si tendría el coraje
para engañar a Roman. No con todo lo que me haría.Ludwig y Roman salieron del despacho riéndose.
-Cariño, ya es tarde, debo dejarte en tu casa en media hora o tu mamá me matará.
-Si... fue un gusto verte, amiga. Adiós Roman.
-Adiós Jo.[...]
-Entonces, si es niño se llamará Connor, y si es niña Alicia.
-Me parece bien- asintió Roman.
Siguió leyendo los papeles que
tenía en la mano.-¿Qué es eso?
-Son documentos, cariño.
-Documentos... ¿Qué clase de
documentos?-De los que no son tu asunto.
Besó mi frente y caminó a su despacho.
-Últimamente pasas mucho ahí.-Tengo mucho trabajo.
-El trabajo se hace en el trabajo, no
en casa.-Tu no me dirás donde hacerlo.
Cerró la puerta de su despacho y
bufé.Gracias, cariño.
De pronto la idea de que algo haya
pasado con John no fue tan mala..
digo... para agregarle algo de emoción a mi vida. Pero él está muy lejos. Eso hace que llegue a mi mente la carta qie alguna vez puso en las flores de Román. El me ama..... Roman solo lo dice por que soy su esposa.
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1939
ActionEn una época donde las tropas se armaban listas para la guerra y donde las familias militares son muy prestigiosas. Un padre decide casar a su hija con un teniente muy joven y reconocido para mantenerla a salvo. ¿Logrará aceptar su destino ? ¿Encon...