Superzam: All I want

U N O

{El día que comenzó todo}
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Cuando Billy caminaba en los pasillos de la Atalaya en busca de un Booster Gold para que le regresara su capa, se topó con el Linterna Verde quien lo llamó.

— Shazam, puedes venir un momento — el mencionado asintió y fue hacia dónde esté se encontraba.

— Sucede algo? — preguntó mirándolo —. Qué le sucede a John Stewart para pedir mi ayuda? — le sonrió.

— Bueno la situación es esta — carraspeó —. Tengo una cita con Shayera el día de mañana, pero-

— ¿Estas saliendo con Hawkgirl? — Billy lo miró impresionado — ¿Desde cuando?

— Eso no importa niño — contestó el moreno negando —. Iré al grano. Necesito que me cubras en la misión de mañana.

— Yo quería saber — se cruzó de brazos, siempre daba por causa su edad, ya que contaba casi con quince años —. Pero mañana...no se, la señorita Molly quiere que conozca a alguien quien quiere adoptarme porque ya sabes — sonrió apretando sus mejillas —, soy adorable.

— Lo que digas — rodó los ojos el Linterna Stewart —. Mañana podrías avisarme? No quiero decirle a Guy porque ya sabes...él no es adorable. Y no trabaja bien con Clark.

Entonces la mirada de Billy cambió, hasta John pudo ver aquel brillo en sus ojos.

— O-Oh, si es así...puedo ayudar. No hay problema.

— No que mañana tú-

— Puff no me llevará todo el día no es así? — sonrió el menor —. Con Superman todo es rápido.

— Si claro — asintió el moreno evitando reír —. Te debo una, Batson.

— Por supuesto — le guiño el ojo Shazam antes de irse.

Cuando estaba lejos de Stewart, saltó de alegría sin que nadie lo viera. O eso había pensando.

— Te venía a devolver la capa pero creo que será en otro momento — Booster Gold comenzó a reír —. Es algo sobre las hormonas o algo así?

— Solo dámela — le arrebató la capa y se fue rápido para evitar que Michael Carter se burlara de él.

Había llegado temprano a la Atalaya, como se había dicho, iba a sustituir a John Stewart con la misión de hoy.

Caminaba tranquilamente a la sala de entrega donde vio a Superman llegar estirándose de espalda.

— Estas listo para la mejor misión de hoy?! — Billy llegó a sentarse en aquella silla y le sonrió.

— Oh, hola Billy — le sonrió el héroe de Metrópolis.

— Estas listo para estar juntos? — preguntó y desvaneció su sonrisa por una mirada nerviosa —. N-No me refiero a eso, es decir, ya sabes, la misión de hoy era que tenía que sustituir a John y — suspiró haciéndose aire con su mano izquierda —, uff, hace calor o soy yo?

— Creo que sólo eres tú — rió el mayor mirándolo —. Y por cierto, la misión la terminé apenas. No hay nada que hacer el día de hoy.