Corrígeme si me equivoco ▬ [Yoonmin]

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Yoongi le acaricia el pelo a Jimin y este acaricia las palomitas que rebotan dentro del cuenco de plástico que hay entre sus piernas. Están tirados en sofá del piso del mayor, viendo una película que ha perdido el interés hace varios minutos.

- Es tan mala que no me da ni miedo —murmura el pequeño, llevándose un puñado de palomitas a la boca. Varias se escapan rodando hasta terminar en el sofá y suelo. Yoongi frunce el ceño pero no dice nada, pues inmediatamente el menor empieza a estirar el brazo para alcanzarlas.

- Podemos quitarla si quieres.

- Nop —no presta atención ni a su pareja ni a la televisión, únicamente intenta alcanzar una palomita que está demasiado lejos como para siquiera rozarla. Yoongi suspira y la coge él mismo, dejándola seguidamente sobre una servilleta en la mesa. Luego se limpia en el brazo y vuelve a acariciar el pelo del menor. — Quiero ver como termina.

- Seguro que mueren todos.

- Seguro que mueren todos menos alguno de los protagonistas —frunce el ceño pensativo y se lleva una de las palomitas que antes se había caído al suelo, a la boca. — Mmm.... morirá el chico. Y luego la chica tendrá que vivir con el dolor y con el cachorrito que se encontraron al principio de la peli.

- Oye Jimin —obviamente ni ha prestado atención a lo que acaba de decir el menor, ambos son conscientes y a ninguno le importa. Incluso el rubio se siente más emocionado al ver que su novio va a cambiar de tema que por la película. — Si rompiéramos...

- ¿Si rompiéramos el qué?

- Nuestra relación, idiota —da un suave golpe en su cabeza y nota como el cuerpo del más pequeño se tensa entre en suyo. Suspira y le abraza. — No pienses nada raro.

- No vas a dejarme... —se gira levemente, para mirarle de reojo y Yoongi le besa la nariz. A pesar de eso Jimin sigue con expresión preocupada. — ¿verdad? — el pelinegro vuelve a besarle, esta vez en la frente, pero el menor le detiene, incorporándose y colocándose encima suyo, pero frente a frente. — ¿Verdad? — repite con preocupación.

- No voy a dejarte, bobo.

- ¿Entonces?

- Me preguntaba simplemente con quien saldrías sin rompiéramos.

- ¿Ah? —ladea la cabeza, y ahora, más tranquilo, vuelve a tumbarse sobre el mayor, boca arriba sin prestar ni un poco de atención a la televisión. Pone un dedo sobre su labio, pensativo, mientras el contrario se hipnotiza con ese simple gesto. — No lo sé, la verdad.

- ¿No tienes a nadie en mente? —sigue pensando unos segundos más pero su silencio deja una obvia negativa en el ambiente. — ¿Ni Jungkook?

- ¿Jungkookie?

- Ahá.

- Uh —frunce el ceño y niega — es mi amigo.

- Sería un buen novio —le cuesta pronunciar cada una de las palabras de esa frase. — creo...

- No entiendo a donde quieres llegar —Jimin vuelve a agarrar otro puñado de palomitas, y cuando las lleva a su boca se desbordan el triple más que antes debido a que ahora se encuentra tumbado. Esta vez no se preocupa de recogerlas porque todas están entre su cuerpo y el del mayor. Cuando termina de masticar las que sí entraron en su boca, empieza a agarrar las restantes y comerlas una por una. — Jungkook me gusta como amigo y somos amigos, fin.

- ...

- Igual que tú me gustas como novio y somos novios. No podría cambiaros los papeles aunque quisiera.

- ...

- Lo que siento es lo que siento — se encoge de hombros y termina metiéndose la última palomita en la boca. — ¿Por qué sacas este tema ahora?

- No lo sé —pone una mueca y se pasa la mano por el pelo, intentando despejar sus ideas. Jimin parece muy claro en todo lo que dice. Cualquiera diría que él es el adulto de la relación. — a veces pienso que no soy la pareja que te mereces.

- ¿Por qué piensas eso?

- No lo sé.

- Entonces te estás preocupando por algo que ni siquiera sabes —ríe y esta vez es él quien besa al mayor — menudo idiota.

- Simplemente podrías tener un novio mejor.

- Yoongi —deja otro beso, esta vez en los delicados labios del contrario. Muy breve. Casi inapreciable para poder seguir hablando. — el mejor novio que puedo tener ahora mismo es el que quiero —deja otro beso, esta vez más largo. Cuando se separa, los ojos del mayor están llorosos, pero ninguno dice absolutamente una palabra, aunque ambos son más conscientes. — y yo espero ser tu mejor novio por mucho tiempo.

- Te quiero.

Sin llorar, inspiró hondo y repitió la frase varias veces en su mente, observando al mejor novio del mundo. Era el mejor del universo, y ahora entendía por qué. Jimin era perfecto porque era exactamente lo que quería. Le iba a querer con más y con menos.

Simplemente, le iba a querer. 

FIN