Better than words

Malas noticias.

La canción "Ain't it fun" de Paramore me despertó a las 7:15 de la mañana... Odio los lunes.

Me metí en la ducha sintiendo el agua caliente caer por mi cuerpo. Creo que es la mejor sensación de un lunes por la mañana, es donde siento que estoy mas tranquila y mas a gusto, además añadamos a la lista que nadie me oye cantar aquí.

Fui a desayunar media hora mas tarde, ya preparada, encontrándome en la cocina con mi tía y mi madre, esta última tenía un gesto en la cara algo triste... Esto no pinta bien.

-Buenos días. -Dijeron ambas.

-Buenos días. -Contesté no muy convencida. -¿Ocurre algo?

-No cariño, ¿que iba a pasar?

-Pues nose... Dímelo tú mamá.

-No pasa nada Abie, ¿por qué lo preguntas?

-Pues porque tu cara dice todo lo contrario... Dile a Hugo y a Cece que les espero en clase, me apetece ir andando tranquila. -No le deje decirme nada, ya qué salí enseguida de casa, no sin antes coger una manzana para ir comiéndola por el camino, dejándoles con la palabra en la boca... ¿Siempre tienen que hacer lo mismo? Esta claro que somos una familia de costumbres... Y de normas. Por lo visto mentir y ocultarnos cosas es la número uno en esa lista de malas costumbres. Nose si mi reacción de salir corriendo ha sido la adecuada, pero no me salía hacer otra cosa... Quiero que confíen en mi y me cuenten todo lo que pasa, o al menos lo que tiene que ver conmigo, ¿no?

Mientras que iba reflexionando sobre las cosas que podrían estar ocultándome escuché un pitido de coche, me giré para ver si era a mí, ya que no veía a nadie mas en la calle... Era un seat nuevo, bastante bonito de color negro. La persona que iba dentro de el bajó la ventanilla. La verdad, creo que es la persona que menos pensaba que podía ser, yo imaginé que sería Hugo que me había alcanzado, o que sería Luke que había pasado a buscarme... Pero era Louis, algo raro, ya que era con las personas con las que menos había hablado.

-Ey Abie, ¿te llevo? -Habló este interrumpiendo mis pensamientos.

-No... Gracias, no tardo nada andando.

-Está empezando a llover y no te veo paraguas, ¿estás segura? -La verdad es que no me había dado cuenta de que estaba empezando a llover, iba demasiado sumida en mis pensamientos... Había unas nubes bastante oscuras, así que decidí decirle que me acercase el.

-Vale, muchas gracias...

-¿Eres siempre tan vergonzosa?

-Hasta que entro en confianza, pero casi nunca cojo confianza, así que se podría decir que si.