La casa de los Sevenzuela -Seventeen y tú-

Cerca...

"Siento que no estoy haciendo lo que me propongo."

"Siento que no hago notar lo suficiente lo pendejo que estoy, por ti."

"¿Recuerdas ese día? No lo creo, tanto bailar te cansó lo suficiente para que no lo notaras."

Suspiró antes de dejar el lápiz en la mesa. Vió todas las notas arrugadas y rayadas con el propio marcador que dejó de usar hace rato, ahora sólo se desahogaba con los pequeños pedazos de papel.

Ángel entró, lo miró y suspiró.

— ¿Entonces?

—Ya me cansé de escribir.— miró al otro, lo había dejado igual.— Se lo quiero decir.

—Dícelo, no sé qué esperas.

—Tengo cague... No creo que espere que sea yo.

Al mayor lo miró con una sonrisa maternal.

—¿Y si no?

—Ojalá. Casi ni pasamos tiempo juntos...

—Relaja la raja. Ven.— dijo antes de tomar una nota no arrugada. Se arrepintió al toque.— No le voy a dar esta nota.

—¿Qué dice?

—"Eres como una hamburguesa especial, lo que te falta es huevo." —Se rió, había escrito eso en un momento de frustración.— Ya se van a acabar las vacaciones aquí, intenta acercarte más.

Miró las notas. Escribió su nombre en una de ellas y se la entregó a Jeonghan.

—Ponla en su cuarto, en un lugar que le sea casi imposible encontrarla.

—Ajá, ¿Para qué?

—Mi mente sabrá que literalmente le dije quién soy, sólo que aún ella no lo lee. —Se levantó de la silla.— Tú eres bueno para esconder las cosas.

—¿Y si la encuentra?

Sonrió, mirando la nota amarilla en las manos del otro.

—Será el día.

...

Se acabó los escribiendo, nos vamos acercando.