CAPITULO 15

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Tuve que dejar de ir a la cafetería.

Tenía una cita con un psicólogo, no era normal que pensara así y más si se tratase de un pobre anciano.

Mi psicólogo decía que no era normal pero que todos llegamos a pensar así en algún momento.

Lo mío era obsesión hacia ti...

A la semana volví a la cafetería.

Todo estaba igual, pero supe que algo faltaba.

No estabas, te volviste a ir.

No lograba entender el por qué, simplemente no apareciste ese día y menos el siguiente, ni el siguiente, ni el siguiente.

Todo era confuso en mi cabeza.

Preguntaba por ti pero nadie sabía nada.

Tu abuelo tampoco estaba en el local.

¿Qué pasaba?

Quizá el psicólogo ayudaría...

Quizá no era yo quien necesitaba psicólogo,

¿O si, Hannah?

No debería de reclamar nada...

HANNAH LA CHICA DEL CAFÉDonde viven las historias. Descúbrelo ahora