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Todo había estado relativamente tranquilo, a excepción de la nota sobre Wonwoo siéndole infiel. No se preocupó al respecto pues no creía que el hombre se enteraría.

—Mingyu, levanta la cabeza, por favor.

Estaba en el estudio para las fotos de campaña para Gucci. Cuando terminaron de maquillarlo se levantó y fue hacia vestuario para colocarse la ropa.

Llevaba cuarenta y ocho horas sin dormir; había terminado su campaña para Calvin Klein en Corea y ahora estaba en China para Gucci.  Posó frente a la cámara durante unas tres horas con pequeños lapsos para cambiarse y comer algo. Cuando terminó fue al hotel en el que se estaba alojando.

Su abogado llamó para informarle que Wonwoo había dejado firmados los papeles de divorcio y sólo era cuestión de que él firmara y el trámite podría ser finalizado. 

Wonwoo había firmado.

Más que enojado, estaba dolido. Al parecer al hombre no le importaba haber tirado a la basura todos sus años juntos. Escuchó unos toques en la puerta. Abrió y se encontró con Minghao.

—Hola, galletita.

Le dio un beso y se apartó para dejarlo pasar. Su teléfono sonó en ese momento y corrió para contestar.

—Hola.

—Kim Mingyu, desgraciado.—Joshua estaba al teléfono.

—Hey, bastardo. ¿Cómo te trata la vida?

—Jodidamente bien. Le hice la gran pregunta a Jeonghan y después de un silencio enorme, en el cual pensé en que sería sacerdote si me decía que no, finalmente me dijo que si.

Se emocionó por su amigo, después de tanto tiempo nunca creyó que colgaría el listón con Jeonghan.

—Amigo, que bueno.

—No te escucho muy emocionado.

—Creí que serias virgen el resto de tu vida, Jisoo. Y que encontraras a un hombre que te quitara esa horrorosa virginidad y ahora haga que te cases... ¡Demonios! Me dan ganas de casarme con el hombre.— dijo riéndose.

—Hey, tú ya tienes a Wonwoo, a mi déjame a mi bello ángel.

Mingyu rió.

—Así que no lo sabes...

—¿Saber qué?

Suspiró.

—Nos divorciamos.—Joshua soltó una maldición.—Si, lo sé. Pero no creas que sólo por eso te librarás de este bello espécimen en tu boda.

—No esperaba menos de ti, idiota. Tú, el caballo, el  hámster, el camello, mi hermano y el dinosaurio serán mis padrinos.

«Wow, todos sus amigos reunidos.»

Siguieron hablando de cosas triviales hasta que por fin cortaron la comunicación. Cuando regresó a la habitación encontró al chino semidesnudo esperando por él.

Y ahí estaba comparando de nuevo a su actual amante con su ex esposo. Mientras que con Minghao encontraba pasión desenfrenada, con Wonwoo siempre fue amor, cariño. 

Esa noche después de tener sexo con Minghao se encontró a sí mismo pensando que si el hombre al que amaba lo quería lejos, entonces lo mantendría lo más alejado posible.

📷

Las últimas dos semanas antes de terminar el ciclo escolar, Wonwoo se tomó sus merecidas vacaciones. Si bien Seungkwan le había dicho que se encontraba mejor, aún no estaba fuera de "peligro". Aún así, le autorizó salir de viaje a China con Soonyoung.