'The Housekeeper' {Niall Horan}

Capítulo 38.

Todo estaba yendo genial entre nosotros, los paparazzis no tenían idea de nuestra relación y así era perfecto.

No había nada que me gustara más que estar con Niall, pero cada vez faltaba menos tiempo y él se iba dos o tres veces en la semana para ensayar lo que sería la gira.

No me molestaba, en lo absoluto, solo me entristecía no poder estar con él.

No puedo imaginar como me sentiré en cuanto inicie su tour y todo lo nuestro acabe.

—¿En qué piensas? —Preguntó Niall, sacándome de mi mente.

—En... nada... —Lo miré, él estaba mirándome atento y pidiéndome que dijera la verdad.

—¿En qué pensabas? —Preguntó otra vez.

—En que falta muy poco para que esto termine. —Solté.

—¿Termine qué? —Unió sus cejas, como si estuviera confundido.

—Lo que sea que tú y yo tenemos. —Suspiré y miré a otra parte.— Te irás por no sé cuánto tiempo y esto acabará.

—¿Quién lo dice? ¿Tú quieres que acabe?

—Niall, es obvio que...

—Mírame. —Moví la mirada hacia él.— ¿Tú quieres que acabe? —Repitió y yo negué con la cabeza.— Nada acabará.

—Niall...

—Puedes ir conmigo al tour. —Sonrió.

—No. —Dije rápidamente y él iba a decir algo, pero no lo dejé hablar.— No digas nada para convencerme, no iré. Es tu trabajo, tu vida, yo no encajo en eso y no quiero ser un estorbo, lo siento.

—Te amo, Becca y quiero que estés conmigo. —Dijo despacio.

Dijo que me ama...

¿No estoy soñando? ¿Lo dijo de verdad? ¿Me ama?

No, quizás no lo dijo en serio.

—No tienes que decirme eso para que vaya contigo, no lo haré. —Bajé la mirada a mis manos sobre mi regazo.

—No lo dije solo para convencerte, lo dije porque es lo que siento. Está bien que no quieras ir, no puedo obligarte. —Suspiró, puso su mano en mi mentón y levantó mi rostro.— Te amo y esto no va a terminar.

—Pero, Niall...

—Dime, sé sincera ¿Quieres que todo acabe? —Me miró a los ojos.

—No, pero escúchame. Te irás y no sé cuándo vas a regresar, estarás lejos y no vas a tener tiempo para esto, yo no quiero hacerte perder tiempo ni algo como eso, ¿entiendes? —Levanté mi mano hacia su nuca y respiré profundo.— Yo también te amo y no quiero arruinar tu vida.

—¿Por qué dices eso, Becca? No entiendo, me haces pensar que quieres dejarme. —Se alejó de mí. Estaba empezando a molestarse.

—Creeme que es lo que menos quiero.

—¿Entonces? —Bufó.— Olvída todo eso, ya te he dicho que no va a terminar esto aunque no quieras ir conmigo. ¿Está bien?

—¿Estás molesto? No fue mi intención.

—No, es solo que odio saber que nos queda muy poco tiempo.

No quería ilusionarme con sus palabras, pero no podía evitarlo, ya estaba ilusionada y creyendo cada cosa que me decía.

Creo que ese no fue el mejor momento para decirme que me ama y yo decirle que también lo amo, pero lo dijimos y se siente como un sueño del que no quiero despertar nunca.

—Ahora estás sonriendo. ¡Becca, deja de hacer eso! —Dijo Niall mirándome como si estuviera loca.

—¿Hacer qué? —Reí.

—Meterte en tu mente y confundirme. —Se movió más cerca de mí, dándome un pequeño beso en la comisura de los labios.— ¿Por qué sonreías?

—Porque me dijiste que me amas. —Sonreí estúpidamente.

—Temía espantarte y que me dijeras que ha sido muy rápido, pero me dijiste que también me amas. —Besó mi mejilla varias veces.

—Sí ha sido algo rápido, pero no es algo que podemos controlar.

—Tienes razón. Recuerdo los primeros días que estuviste aquí, te ponías tan nerviosa que ni siquiera caminabas bien. —Rió como solo él sabe hacerlo, a carcajadas.

—No te burles, eres Niall Horan, ¿Qué esperabas? No parece, pero sigo poniéndome nerviosa. Aún no me lo creo. —Sonreí.

No mentía, cada mañana al despertar agradecía que todo no era un simple sueño, luego ver a Niall con su cabello despeinado, su rostro hinchado de dormir y su voz tan grave, me hacía querer gritar y lanzarme a él.

Aún me ponía nerviosa verlo sonreír y cada vez que estaba demasiado cerca para besarme.

—¿Qué es lo que aún no crees? ¿Que eres mi novia? —Me besó suavemente.

—¿Tu novia? —Levanté las cejas con sorpresa.— ¿Desde cuándo?

—Desde el momento en que entré a la habitación del hotel, te hablé y quedaste paralizada. Desde ese instante, solo que tú no lo sabías aún. —Movió sus hombros, como si fuera algo muy normal.

—¿Sin importar que sea una simple sirvienta?

—No hay nada de malo en eso. —Agarró mi mano y la besó.— Quiero invitarte a cenar y antes de que digas algo, no me importan los fotógrafos y todos ellos, será perfecto así, que todos sepan que eres mi chica.

—Niall...

—¿Tanto odias la fama? —Preguntó y yo asentí.— Si estás conmigo, no queda más que acostumbrarte a eso.

—Tal vez no deberíamos estar juntos.

—Becca... —Se quejó.

—Estoy bromeando, pero de veras que no me gusta. Recuerdo como me trataron cuando creyeron que yo había robado tu reloj. —Giré los ojos.— Eran como leones hambrientos y yo era la única presa.

—Lo sé y me gustaría que no pasaras por eso, pero no puedo cambiarlo. —Hizo una mueca con sus labios.

Sí, tendré que acostumbrarme a todo eso aunque lo deteste, pero es lo que debo hacer si quiero estar con Niall y realmente quiero estar con él.

Salir con alguien tan conocido como él, no es nada fácil.

Él quiere que todos lo sepan y yo tengo tanto miedo, quiero que nos quedemos encerrados, que nadie nos vea ni le digamos a nadie.

Aún pienso en que no tengo idea de cómo funcionará nuestra relación cuando él esté lejos, pero lo intentaré.

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Muchas gracias por leer ♥