"You say we're just friends... But friends don't know the way you taste"
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Camila
Acomodo mis audífonos. No quiero volver a escuchar su comentario.
No cuando le dejé claro que sólo la veo como una amiga, que a pesar de que en algún momento pude sentir algo ella me hizo daño y no entiendo cómo puedo seguir a su lado llamándola "mejor amiga".
—¿Entonces? —enarca una ceja y me observa con la expectativa de que le responda. Cómo desearía que mis audífonos me dieran el super poder de volverme invisible.
—No. No saldré contigo más tarde, debo ir a trabajar en el turno de noche... Además ya me tengo que ir, porque tengo que ir a buscar con quién puedo dejar a Sofía.
—Que se quede conmigo.
La miro extrañada. No es que le gusten los niños, así que... Es raro.
—¿Qué?
—Sí bueno... Por algo soy tu mejor amiga, ¿no?
—Okey —suena más como una duda que como una afirmación, pero ella sólo sonríe—. ¿Vas conmigo o llegas luego?
—Iré contigo. Así puedes contarme más sobre ese idiota misterioso.
—Dijiste que no lo ibas a llamar así más.
Hace como si se estuviera cerrando la boca con una cremallera y se encoge de hombros. Suspiro.
Tomamos el autobús que nos llevará a casa, logramos conseguir un puesto para las dos. Odio ir de pie porque los barandales para sostenerse son muy altos y yo no lo soy tanto.
—¿Prácticamente Iva te lanzó a sus brazos? Esa bruja, yo...
—Lauren —pongo una mano en su boca, pero me muerde un dedo—. ¡Oye!
—No me disculparé por eso —suelta una carcajada.
—Qué gran amiga eres —comento cuando nos bajamos una parada antes de la que debíamos, porque el conductor anunció que hay un fallo, tendremos que caminar.
—¿Amiga? —me molesta. Aunque a estas alturas ya no sé qué dice en serio y qué es broma.
—Eres mi amiga, ¿no?
—Eso dices, pero para mí, los amigos no conocen la manera en la que sabes.
Me sonrojo de inmediato. ¿Por qué hace esto?
—Si lo dices porque me mordiste hace un rato, yo no soy tan rica...
—Ambas sabemos que no hablo de eso —sonríe.
Vamos Camila, no es momento para que te quedes repitiendo esa frase en tu mente como un disco rayado... Piensa en qué responder... Eres estúpida pero tengo fe en que saldrás de esta.
La mejor alternativa, claramente, es cambiar de tema, pero ¿de qué hablar? ¿El clima? ¿El almuerzo? ¿Política? ¿Música?
—¿Escuchaste la nueva canción del presidente? La escribió porque el pobre tenía hambre y estaba haciendo calor pero le sirvieron sopa y se enojó.
Suelta una carcajada.
¿Por qué Camila? ¿Por qué?
—¿Qué acabas de decir? Tal vez el verano te está afectando más de lo que debería.
—Sí, podría ser eso —río de manera nerviosa.
Seguimos caminando algunas cuadras, en este punto somos sólo sudor. Miami quiere matarnos.
