Controlarme.

1.9K 286 63
                                    

Trigger Warning: Contenido Sexual.

Estábamos comenzando con las grabaciones de nuestro nuevo concepto, un nuevo álbum que tendría una aproximación bastante diferente de las cosas. A partir de este momento comenzaría un nuevo hilo que giraría en torno a ti. Es un concepto tan denso y largo que ni siquiera soy capaz de entenderlo del todo, pero estoy seguro de que lo haremos más que bien.

Comenzamos a practicar I need U. La coreografía era bastante simbólica y era más exigente en técnica A diferencia de nuestras primeras coreografías requerían más fuerza. Por fortuna ya no nos teníamos que forzar tanto como nos teníamos que esforzar en el debut, pero tampoco es que esto sea un paseo.

Tú te veías tan deseable con el sudor escurriendo por tu cuerpo, pegando la ropa a tus trabajados músculos. Tenía que controlarme para no terminar babiando en la sala de ensayo.

Desde el primer momento te había visto de esta manera pero ahora era diferente, porque sabía que estaba estabas a mi alcance era una realidad plausible. Era complicado mantener a raya mis ganas que iban creciendo día con día y el hecho de que fueras tan exageradamente sexy no hacía nada más que provocarme. ¿Tienes una idea de lo difícil que es controlarme contigo?

A veces siento que me torturas a propósito, como cuando ves que nadie te está viendo, sólo yo, entonces empiezas a jugar con los bordes de tus shorts mientras me miras guiñando el ojo. ¿Es que planeas matarme, Kim Seokjin?

Tenía que hacer algo respecto porque sentía que iba a explotar en cualquier momento. Yo también traté de volverte las jugadas, pero creo que sólo estoy siendo yo el perjudicado aquí. Pareces tener tanto control de tu propio cuerpo, de tus propias reacciones que se sería muy impropio de ti que reaccionaras de manera impulsiva conmigo.

Tal vez porque eres mayor, tal vez porque tienes más experiencia que yo. Pienso esto a menudo, me siento un poco en desventaja, tal vez sí me hubiera dado la oportunidad de amar a alguien antes tendría un poco más de experiencia en este momento y no me sentiría como un niño perdido tu lado.

Nuestra relación aún no tenía términos explícitos, pero era muy diferente a la de todos los demás. No sólo yo como siempre mirándote como una polilla a la luz, esta vez tu eras más consciente, esta vez a veces me mirabas igual.

He perdido la cuenta de cuántas veces me he corrido gimiendo tu nombre en la ducha después de los ensayos. Sé que a veces me escuchas, ¿Qué pasa que no entras conmigo? ¿estaré siendo demasiado atrevido?

Ese día estaba pasando mis manos por mi cuerpo mientras el jabón se deslizaba por mi piel.  Recordaba tu mirada penetrante a través del espejo mientras ensayabamos los pasos exactos, los pequeños roces que me hagas con las manos o cualquier parte de tu cuerpo como si no fueras consciente. La manera de que me coqueteabas cuando ningún otro miembro estaba mirando. Diablos mi cuerpo estaba temblando, sólo de pensar en tu mera presencia.

No pude evitar pasar mis dígitos por la palpitante aorta bajando por mis clavículas, recorriendo mi pecho y posteriormente mi abdomen. Solté un suspiro imaginando que eran tus manos las que me recorrían, mi centro se encontraba palpitante y con un gemido profundo lo envolví en mi mano. Comience a estimularme así, justo de la manera en que me gustaba mientras las gotas golpeaban mi espalda. Sabía que no tenía mucho tiempo entonces tenía que apresurarme, haciendolo más rápido, sin vergüenza de mi voz resonando por las paredes porque mis propios gemidos me hacían calentar más.

—Jin... Hyung, ah... ¡Jin-hyung!—mi voz gruesa se quebraba en gemidos cuando me vine abismalmente pintando la pared de la ducha con hilos blancos.

Recobré mi respiración luego de un gran orgasmo en el que mi mente estaba inundada de ti. Sintiendome más relajado termine de lavarme y tomé la toalla para secarme. La envolví alrededor de mi cintura.

Abrí la puerta de la ducha, secándome mi cabello con otra toalla pequeña para quedar sin respiración al verte apoyado sobre el lavamanos.

Tenias el ceño fruncido y los brazos cruzadas y tu mirada penetrante me hizo temblar las rodillas.

—Hyung...—. Me aventuré en voz baja observandote nervioso.

—¿Que crees que haces?—. Soltaste en tono enojado y tuve miedo por mi vida.

Sálvame señor, espagueti volador.

El día en que me quieras ✘JintaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora