El día en que me quieras ✘Jintae

Explicarles.

—¿No creen que Jin-hyung y Taehyung pasando mucho tiempo juntos?—Te miré con pánico y Jungkook dió palmadas en mi espalda, mientras regulaba la respiración. Los demás sólo nos veían.

-¿A qué te refieres? -. Tú mirada se posó sobre Hoseok tan neutral que sí no fuera porque nos besamos tanto durante la noche, realmente no sabría a que se refería J-hope con todo eso.

-Si, ¿A qué te refieres, Hobi?-. Yoongi lo miro con curiosidad y los demás también miraban a Hoseok con interés. Solo esperaba aferrarme a mis pobres clases de actuación para no poner ninguna expresión que me pueda delatar.

-Por favor, Jin-hyung, sabes a lo que me refiero. ¿Por qué Taehyung duerme siempre contigo? -. Observé a Hoseok cruzarse de brazos y Jimin apretó mi muslo por debajo de la mesa en un gesto tranquilizador.

-No sé de qué estás hablando-. Mencionaste con seriedad y decidí que lo mejor sería si yo no pronunciara ninguna palabra porque me sentía transparente en ese momento, ante las miradas de mis hermanos.

-Antes de aquella noche, al no encontrarlos a ninguno, yo subí a la azotea a buscarlos y ahí fue cuando los vi...-. Hoseok frunció el ceño turnando la mirada entre el rostro de ambos y tomó todo de mí no soltar un pequeño grito. Vi cómo tu cara también al parecer había perdido color.

-Era de noche y estaba oscuro. Sólo salimos a hablar, eso no significa nada. - comentaste con seriedad aún estoico, admiraba la manera en que parecías tan en control de todo.

-Solo estaban hablando, no veo cuál es el problema. -comento Jimin tratando de apaciguar las aguas y sólo pude agradecerle mentalmente.

-Sé bien lo que vi.- Soltó Hoseok completamente serio y pasé saliva con miedo. Al parecer hoy no habría manera de detener lo que quería decir.

-¿Qué fue lo que viste? -preguntó Namjoon con suma atención a las palabras expresadas. Jugué con mis manos con nervios pidiendo un milagro. Tú sólo mirabas a Hobi sin expresión y mi corazón latía con tanta fuerza que tuve miedo de que los demás pudieran escucharlo.

-Seokjin y Taehyung estaban en la azotea, ellos no estaban sólo hablando, ellos... se estaban comiendo la boca.

SEÑOR ESPAGUETI VOLADOR ¿¡POR QUÉ NUNCA ME SALVAS?!?!?

-¿Comiéndose la boca?-preguntó Jungkook confundido. -¿Boca como esos dulces de gomitas? ¿Es por la dieta? Todos comemos cosas dulces cuando podemos, ¿Por qué lo mencionas así?

Eso me hizo sonreír suavemente, simplemente adorable su primer pensamiento. Ay, amo su inocencia.

- Hoseok, si se trata de eso, de verdad no veo problema en absoluto. Todos necesitamos ese tipo de escapes a veces. - Namjoon se encogió de hombros y siguió comiendo su desayunó.

Observé a Hoseok suspirar frustrado, haciendo una pequeña mueca tratando de calmarse. Ver a Hoseok enojado, me asustaba, creo que a todos también.

Afortunadamente, el mánager entró en ese momento para apurarnos y comenzar con las actividades del día. Me sonreíste ligeramente y a pesar de que me tranquilicé un poco, sabía que esto sólo era una especie de victoria temporal.

El día transcurrió extraño, los chicos actuaban normal pero podía sentir esa energía extraña proviniendo de Hoseok y no podía tolerarlo mucho. Siempre me gusta estar bien con todos y saber que algún miembro está enojado conmigo, me pone muy mal.

Por eso cuando estábamos almorzando, te escribí para encontrarnos en el baño. Cruzamos miradas antes de que yo me excusara para ir al baño y una vez allí, me hice en un cubículo a esperarte.

Unos minutos después tú apareciste por la puerta y aunque me daban ganas de darte un gran beso, habían cosas más importantes que tratar.

-Hyung, creo que tal vez debería ser tiempo de contarles.- me miraste con una expresión seria y lamí mis labios nervioso, —Hoseok ya lo sabe, no tiene sentido seguir dudando de eso y yo prefiero que se den cuenta porque les decimos a que nos vean haciendo algo raro...

Te quedaste en silencio unos segundos y a mí me entró algo de miedo. Finalmente, asentiste y acunaste mis mejillas.

—Tengo miedo, Taehyung... Tengo miedo de que nos juzguen, de que no nos entiendan. Pero sobre todo, tengo miedo de que nos separen. —mi corazón se encogió al oirte, mis labios se abultaron un poco.

—No nos pueden separar hyung, esto es demasiado hermoso. Es algo que las personas siempre buscan pero muy pocos encuentran y no estoy dispuesto a alejarme de ti por algo como eso. No pienso separarme de la persona más especial que hay en mi vida. —solté con seguridad pasando mis manos por tus caderas, acariciando tratando de relajarte y tú pareciste sorprendido por mis palabras. Cerraste los ojos y juntaste nuestras frentes. Amaba solo el tenerte así, cerca a mi de esa manera.

—Tienes razón, encontraremos la manera. —suspiraste y te separaste para mirarme a los ojos. Dios, aquellos ojos transmiten tantas cosas y siento cosas en mi estomago cuando me miras de esa manera. Acortaste la distancia y juntaste nuestros labios para darme un pequeño beso que hizo sentir cálido mi pecho.

Después de eso era tiempo de volver, me adelante volviendo de nuevo a la mesa, haciendo caso omiso de las preguntas que hicieron de ti. Hoseok me miró con sospecha y solo me pude concentrar en mi carne.

Llegaste unos minutos después y te sentaste delante mío. Comimos por unos minutos y cuando estábamos a punto de finalizar, te aclaraste la garganta.

—Chicos, tenemos que hablar. Aprovechando que es viernes y mañana tenemos libre la mañana, les prepararé la cena y tomemos algo, ¿Les parece bien?

Todos se miraron sorprendidos pero rápidamente accedieron. A mí lado, Jimin me hizo algo de señas que en algo como nuestro propio lenguaje venía diciendo "¿Estas bien? ¿Lo que dijo es sobre Jin-hyung y tú?" Solo pude asentir y el rápidamente se paró para sentarse a mi lado y darme un abrazo muy fuerte.

—Tengo miedo, Jiminie—. Murmuré sobre su hombro y el acarició mis espalda.

—Estoy contigo, Taehyungie—.