Besarte.

2.3K 322 26
                                    

Entonces estaba probando tus labios. Sabía que esto no estaba pasando realmente. Estabas siempre en mi cabeza y mis emociones estaban tan al límite, que a este punto no se me haría raro poder sentir tu presencia, así sea solo mi imaginación.

Pero si no estaba sucediendo, ¿Por qué se sentía tan real?

Tus labios eran suaves, dulces y mi corazón parecía querer salir de mi cuerpo. Todo mi cuerpo se estremecía por un contacto tan leve, sólo con el mínimo roce de nuestros labios.

Pero es que yo había idealizado tanto este momento, un imaginario imposible en donde me apoderaba de aquella boca irresistible que me provocaba día con día.

Estoy completamente loco por ti.

Sentí mi alma, plenamente, como si estuviera saliendo por mis poros. Ese es el poder que tienes en mí.

Se sintió suave, como una ligera caricia que tenía un control impresionante y que provocaría repercusiones por el resto de mi vida.

Me separé apenas un poco y abri mis ojos. Pude toparme con tu mirada algo perdida, te veías tan adorable e inocente que no pude evitar sonreír, sintiendo aún los estragos de mis acciones. ¿Por qué tienes que ser tan adictivo?

—Vamos a dormir, hyung—. Mencioné tomando tu mano para dirigirnos adentro, nuevamente hasta tu cama.

Solo me seguiste, sin pronunciar ni una sola palabra. Llegamos a la habitación, tú te acostaste y yo solo me acosté a tu lado y me aferré a ti complacido enormemente por la calidez de tu cuerpo y tu encantador aroma con un efecto sumamente relajante.

—TaeTae...—. Susurraste y yo solo alce la mirada para encontrar tus ojos fijados en los míos. Sonreí porque se sentía tan bonito estar entre tus brazos y que me mirabas de la manera en que lo habías.

—Jinnie-hyung...—mi voz salió melosa en un tono bajo y tú me sonreiste de igual manera. Acariciaste con suavidad mi mejilla y sentí que me moría cuando te acercaste para juntar nuestros labios.

Fue apenas un roce corto pero me sentía en las nubes.

Me acomodé sobre tu pecho.

Desperté al día siguiente sólo en la cama. Tenía una felicidad absoluta. Fue el sueño más bonito del mundo. Salí de la habitación maravillandome con el provocador aroma a comida que se instaló por todo el ambiente.

Caminé contento hasta el comedor dónde los demás chicos ya estaban probando el desayuno.

—Buenos días chicos—. Saludé a todos con una gran sonrisa antes de tomar asiento.

—Pareces de muy buen humor, eso es genial, hace días parecías bastante abrumado—. Comentó Hoseok, partiendo un poco unos pancakes sobre su plato.

—Es verdad, sabes que puedes contarnos cualquier cosa. De todas maneras me agrada verte con buenas energía nuevamente, Taehyung—. Namjoon pronunció con una ligera sonrisa a lo que Yoongi también me asintio. Los hyungs eran detallistas y podían apreciar ese tipo de cosas, siempre se preocupaban por nosotros.

—Tuve un sueño reparador, ahora siento que tengo muchísima más energía y bien ánimo—. Les di una pequeña sonrisa cuadrada. Ese día tendríamos que ir a practicar para grabar Danger, lo cual no supondría en teoría mucho problema.

Jimin sólo me miro inquisidor, le murmure que hablaramos luego. Tú saliste de la cocina, dejaste mas pancakes sobre la mesa y te sentaste a lado de Yoongi, enfrente de mi. Te veías hermoso, tal vez era que me había enamorado otro poco, cosa que yo creía imposible.

Al parecer sentiste mi mirada sobre tí porque cuando nuestros ojos se cruzaran, bajaste la cabeza con un ligero sonrojo.

Es que acaso era posible que... ¿No hubiera sido un sueño?

Sentí mis manos temblar ante esa posibilidad.

Respiré profundo y traté de relajarme. Tal vez solo habia sido que yo tenía una erección matutina y tú tuviste que sentirla cuando te despertaste, si seguro no era nada de que preocuparme....

Un momento, ¡Qué vergüenza! ¿Habrá sido eso?

De nuevo, una duda se instaló en mi. Necesitaría hablar con Jimin, acerca de un bonito sueño, y unos bonitos labios que habían sellado mi destino y tatuaron en mi corazón el nombre de Kim Seokjin.

El día en que me quieras ✘JintaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora