El día en que me quieras ✘Jintae

Ganar.

Habíamos terminado la presentación y ahora estábamos sentados en la zona de artistas mirando quienes ganaban a la nominaciones. Estabas sentado al otro lado del que estabas tú, pero por supuesto eso no iba a detenerme. Cuando ví mi momento, actué levantándome como si nada para llegar hasta ti.

Tomé mi lugar a tu lado con facilidad, envolviéndote con mi brazo. Estabas confundido, lo noté por cómo te tensaste, pero eso no me iba a detener.

Yo tampoco hice nada fuera de lo común, tratando de parecer tan casual como aquél hecho de haber cruzado la mesa sólo para estar contigo. Sinceramente todo fue instintivo, pero después de toda la tensión por la que habíamos pasado, no quería estar más lejos, me empujabas hacía ti como la gravedad misma y estaba tan harto de fingir que no me afecta, que no puedo tolerarlo más.

Actuaste con tranquilidad y yo me apegue a esa actuación, tratando de aparentar que estar sentados juntos no era la gran cosa a pesar de que casi nunca lo hacíamos. ¿Por qué no me sentaba a tu lado? Eso era de sencillo de responder, la misma razón por la que nunca compartimos habitación o porque ya no podemos hacer vlives juntos; soy ridículamente obvio.

Claro que después de todo lo que hemos pasado, evidentemente el tono de mis acciones bajó muchísimo. Mi ánimo y mi carácter estaban cambiando, los chicos lo notaban, las fans lo notaban, ¿Lo notabas tú?

Aunque sigo siendo la misma persona en esencia, las cosas por las que he tenido que atravesar me han hecho crecer de golpe y ya no puedo actuar con naturalidad o con una actitud infantil o en extremo optimista porque he observado el lado oscuro que la vida tiene realmente y sería irresponsable de mí parte no actuar correspondiente a esas experiencias.

El MC dice algo y nosotros repetimos animadamente. El sólo hecho de estar a tu lado trae a mí tanta energía que sólo puedo sentirme más ligero. La situación se calma un poco por un momento y yo te observo.

— ¿Sabes que te ves delicioso hoy, hyung? — susurró en tu oído, tapando mi boca para que los labios no se vean.

— ¿Qué esperas diciéndome eso en público? — me respondes también secreteando en mi pidió.

— Que me beses, obvio. — contesto confiado y tú me pegas en el muslo rápidamente por mí descaro. No puedo evitar reírme y al verme tu ríes también.

Después de eso me alejo un poco y paso mi manga sobre tu cuello, al frotar las lentejuelas sobre esa piel eres rápido en ladear la cabeza y darme más espacio. Tu cuello definitivamente es una de mis perdiciones.

— Eso se siente bien. — me comentas nuevamente mientras me acomodo en mi asiento, paso mis dedos sintiendo mi propia manga y me vuelves a susurrar. — Eres más brillante que las lentejuelas.

Distraigo mi atención para no verme ridículamente obvio y para no levantar sospechas, intentando parecer concentrado en lo que sucede a mí alrededor. Sin embargo, atento a todos tus gestos y reacciones siempre.

En una de esas veces, uno de los hilos de mi chaqueta se enredó en la manga. Lo notaste rápidamente y me ayudaste, rompiendo los hilos con destreza de quién lo hace todos los días.

Actúo naturalmente, agradeciendo lo que Hwarang hizo por mis habilidades actorales.

— Te sentaste a mi lado. — me comentaste al oído, pasé la mano sobre tu hombro nuevamente. — ¿Tanto me deseas?

— Te deseo. — susurro en voz baja y con seguridad a tu oído. Recibo otro golpe.— Estoy loco por ti, Kim Seokjin.

Levantas tu mano para golpearme y yo la detengo, pero pareces tan decidido a hacerlo que levanto la pierna para recibir el golpe y dejo ir tu puño que se estrella en mi muslo.

El dolor me hace reír, al menos tú también te ríes. Me acaricio la zona del golpe y palmeas mi mano por la tuya por unos momentos.

Actuar con naturalidad. Me repito a mi mismo, disimulando lo mejor que puedo.

Recuerdo hace dos semanas, cuando en los MMA ganamos nuestro primer daesang. Álbum del Año, una de las grandes categorías. Era tan impresionante cuando anunciaron nuestro nombre que no podíamos creerlo en primer lugar. Recuerdo que camine en el escenario preguntándome si de verdad estábamos a punto de recibir un premio tan importante. Lloraste en el escenario ese día y fue demasiado adorable.

Aquel sentimiento había sido tan magnífico, que nos hizo dar todo de nosotros en los MAMA que eran aún más importantes que los MMAs, aquí estamos ahora después de la presentación y estamos nominados para el premio más grande del año.

El premio más memorable tenía que ser el de Artist of the Year. Ahora escuchábamos el nombre de BTS entre las nominaciones y por primera vez en estos eventos, siento verdaderos nervios.

— El ganador al mejor artista del año...

¿Vamos a ganar? ¿Será posible que ganemos? Realmente no quiero ilusionarme pero no puedo evitar apretar mis manos con fuerza sintiendo como si mi corazón fuera a explotar dentro de mí pecho.

El silencio abrumador de la presentadora y los gritos de las fans por los artistas llenan mis oídos.

— Bangtan Sonyeondan.

La sensación que nos invadió era tan fuerte que aún nos sentíamos algo aturdidos. Nos dimos un abrazo fuerte y caminamos al escenario para recibir lo que se sentía con absoluta redención.

Namjoon se paró enfrente del micrófono, intentando poder dar un discurso pero tenía un nudo en la garganta y no parecía hallar las palabras correctas. Sin embargo, nuestro líder no decepcionó, dando un hermoso discurso que me llenó de tanta alegría, nostalgia, orgullo, era un momento tan abrumante que tomó todo de mí, no romper en lágrimas. No era la misma historia para los demás miembros, sobretodo Yoongi, quién rompió en llanto como hace mucho no lo veíamos.

Saboreamos la gloria. Hay un momento que quiero guardar para siempre en mi corazón y es este.

BTS finalmente ha sido conocido y respetado.