Parte 10: Exigencias

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POV JONGIN




Cuando la conciencia fue volviendo a mí, solo pude ser capaz de notar el peso asqueroso que estaba en mi cuerpo. Era como si me hubiese arrollado un camión, aunque metafóricamente, pues jamás me había arrollado uno como para saber qué se sentía.

Sin embargo, la sensación que sí comenzó a molestarme fue sentir unos suaves toques en mi rostro que comenzaban a arder un poco, entonces recordé lo que había pasado y el hecho de que habían golpeado a KyungSoo por mi culpa. Joder. Lo que más temía que pasara había ocurrido.

—Mhg... KyungSoo... Duele... — Me quejé al sentir sus manos en mi tórax, los moretones que seguramente tendría ahí a causa de los golpes debían estar horribles para que ese simple tacto doliera.

—Sh, lo siento. Lo haré más suave. — Esa definitivamente no era la voz de KyungSoo, por lo que mi ceño se frunció cuando intenté abrir los ojos. Me dolía la cabeza ligeramente, pero nada que no pudiese controlar.

—¿Kyung...?

—No, no soy KyungSoo. Soy ChanYeol.

ChanYeol...

Ahora podía recordar que KyungSoo gritó su nombre antes de caer desmayado, ahora tenía sentido el que estuviera recostado en una cama, suponía que en mi casa pues mi amigo no se arriesgaría a llevarme a otro lado y que me vieran en esas condiciones. Lo conocía muy bien.

—Yeol... KyungSoo, lo golpearon... Él estaba herido... — Intenté sentarme en la cama, pero sus manos me detuvieron por los hombros justo cuando abrí los ojos, notando que por nuestros movimientos habíamos quedado muy cerca.

Quizás demasiado.

Sería un mentiroso si dijera que en ese momento no me detuve mirando sus ojos directamente, e incluso, me atrevo a confesar que por un rápido segundo mis ojos descendieron hasta su boca, perfilando sus labios de tal manera que me sentí un acosador, pero ni aun teniéndolo en mente fui capaz de desviar la mirada.

Por otra parte, ChanYeol no parecía demasiado incómodo con aquella cercanía, ninguno decía nada ni se movía un milímetro. Mis dolores habían pasado a segundo plano por esos extensos minutos en que estuvimos solamente mirándonos, sin embargo, cuando escuchamos la voz de alguien más al otro lado de la puerta fue como un corrientazo que nos trajo de vuelta a la realidad.

Mi rostro se puso rojo en demasía acompañado con los latidos desenfrenados de mi corazón.

¿Qué mierda me estaba pasando? ¿Cómo se me ocurría quedarme de aquella manera observándolo? ¿Se habrá molestado?

Me recosté otra vez en la cama con un movimiento demasiado rápido que me hizo maldecir en voz alta ante el mareo, provocando que ChanYeol dirigiera de nuevo su mirada hacia mí.

—No te muevas tan bruscamente. — Me regañó con seriedad, aunque en el fondo podía notar que estaba algo perturbado, ya no fijó su mirada en la mía y se desvió a mirar a su amigo justo cuando éste entró a la habitación.

—Por suerte no la tenía quebrada, así que de un movimiento pud-... Oh, Kai. Me alegra que estés despierto.

—Kris... — Dije en voz baja, lo conocía simplemente porque durante los campeonatos todo el mundo hablaba de él, era imposible no conocerlo en la escuela y, sin embargo, el chico a pesar de su popularidad y buena apariencia se mantenía con un perfil bajo, pasando desapercibido. — ¿Por qué...? ¿Qué hacen aquí?

Don't deny it [ChanKai]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora