Parte 39: ¡Maldición!

265 38 8
                                    


POV CHANYEOL






Me quedé esperando noticias de JongIn. Lo había estado llamando desde temprano, bastante ansioso por saber cómo le había ido en el examen y quizás celebrar de alguna forma, pero mis intentos se habían frustrado cuando no respondió mis llamadas y no hallé forma de comunicarme con él. Quise pensar que había estado ocupado durante todo el día, seguramente YunHo y JaeJoong también habían tenido mí mismo pensamiento y lo habían mantenido ocupado. Sin embargo, rechacé aquella teoría cuando al día siguiente tampoco logré contactarme con él, BaekHyun y KyungSoo me decían que no sabían nada y YiFan andaba tan en su mundo que apenas sabía quién era yo.

Para el tercer día sin saber nada de él ni por llamada, mensaje o amigos, decidí que era momento de mover el trasero de mi cama, sobre todo porque Yoora ya comenzaba a impacientarse.

"Te has demorado demasiado en presentarme a JongIn, ¿Temes que me encuentre más guapa que tú y te deje?". Obligándome a recordarle por enésima vez que, si JongIn y yo estábamos juntos, era porque obviamente teníamos preferencias por los chicos.

Lógicamente el primer sitio que me encargué de visitar fue su casa. Luego de almorzar con Yoora ese día cerca de su oficina, tomé un taxi que me llevara a casa de JongIn lo antes posible. Estaba un poco ansioso, quizás porque ya había asumido que el hecho de que no respondiera a mis llamadas ni mensaje era un mal presagio, y es que tenía esa sensación de preocupación en el pecho que me advertía que las cosas estaban complicadas nuevamente, y esta vez sí que no tenía idea del por qué.

Pagué la carrera al taxista y me bajé del vehículo soltando el aire que no sabía que estaba reteniendo. Caminé a paso tranquilo hasta la puerta de la casa de JongIn, sabía que alguien estaba dentro pues el auto de YunHo estaba aparcado en su sitio, así que con más fe que confianza golpeé a la puerta esperando unos segundos a ser recibido.

—ChanYeol. — Dijo YunHo apenas me recibió en la entrada, tenía un trapo de cocina entre manos y un delantal que sabía le pertenecía a JaeJoong, tenía una extraña obsesión por comprar delantales femeninos para la cocina. — ¿Qué haces aquí? — Me quedé de piedra ante ese tono arisco, su expresión cambió a la misma con la cual me miraba en el tiempo que JongIn y yo estuvimos separados; como si me detestara completamente y le desagradara mi presencia.

—Señor Jung... — Salí de mi trance sabiendo que no servía de nada tener estos debates mentales, solo aplazaba la tortura e incertidumbre. — Solo venía a ver a JongIn, desde hace dos días que he intentado contactarme con él, pero no responde mis llamadas ni mensajes, él está bien ¿Verdad? ¿No ha pasado nada malo?

—No sabes. — Dijo como si fuera absolutamente deshonroso que estuviese ahí preguntando por su hijo. Negué con la cabeza de manera lenta, pensando que hablar no era lo mejor que podía hacer en ese momento. — JongIn no quiere verte, y sinceramente JaeJoong y yo tampoco. Estuve completamente equivocado con respecto a ti, ChanYeol. Así que te pediré de buena manera que te vayas de mi casa, y que por favor no vuelvas a aparecerte por aquí.

Me tomó unos segundos asimilar sus palabras. Acababa de confirmarme que JongIn no me contactaba por algo que supuestamente había sido culpa mía, pero si rebobinaba a los días anteriores, sinceramente no tenía idea de qué había hecho esta vez para cagarla. Lo que me tenía aún más desconcertado.

—Pero ¿Qué...? ¿Qué ha pasado esta vez? ¡No he hecho nada, lo juro! ¡Solo he estado desde hace dos días esperando saber cómo le ha ido a JongIn en los resultados!

Don't deny it [ChanKai]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora