-Es definitivamente imperdonable el escándalo realizado en el pasillo ¿acaso no les da pena?-preguntaba la profesora de transformación y nueva directora de Hogwarts Macgonagall-¡les he hecho una pregunta!-exclamóó al ver que ninguno de los presentes respondía-No tienen remedio-murmuró con pesadumbre-¿saben cuántos años han mantenido esta constante pelea?
-¿siete años?-respondió Ron dudoso.
-¡SI!-exclamó provocando que los presentes saltaran en sus asientos -casi 7 años ¿no les da vergüenza?
-¿vergüenza?-preguntó Harry enojado-vergüenza debería darle a este infeliz de Malfoy por habernos molestado todo este tiempo, a él es al que debería darle vergüenza, a él es al que debería castigar, mas no a nosotros.
-Mira como lloro Potty- se burlaba Draco mientras hacia un gesto teatral-Si Harry Potable no me hubiera golpeado, nada de lo que pasó en el pasillo hubiera sucedido-le dijo a Macgonagall.
-Miren como salieron ustedes tres jóvenes, están golpeados-y era cierto el aspecto de ellos era de personas acabando de salir de guerra, Malfoy tenía parte de su camisa rota y su labio superior sangraba, Harry un ojo morado y el cuello de su camisa degastado y Ron tenía un enorme golpe en la mejilla (producto de Malfoy) que no le favorecía en nada.
-Pues Malfoy debió haber respetado a Hermione desde un principio - acusó Ron.
-Los problemas personales entre Malfoy y Granger lo arreglan entre ellos ¡y ustedes no tienen que actuar de forma tan salvaje!, no son animales, ¡pueden hablar!
-¡¿yo tuve que haber respetado a Granger?! Créanme que ella fue la que no me respeto a mi-agrego con una seductora sonrisa.
-¡Sr. Malfoy por favor!
-Maldito-dijeron Harry y Ron al unísono antes de levantarse para ir hacia Malfoy, no sin antes ser detenidos por un hechizo de Macgonagall.
-¡Contrólense por favor!, esto no es un campo de batalla, es mi despacho y exijo que lo respeten igual que a todo el colegio-la profesora posó su mirada al suelo pensando-es evidente que tengo que colocar una sanción, el problema exactamente es ¿Cuál?
-Colóquele la sanción a Potable, al incendiado y a la sabelotodo insufrible de Granger, pero no a mí.
-Señor Malfoy, usted tuvo una gran parte de culpa al insultarla .
-¡Yo no la insulté!.. De hecho ella fue la que me insulto a mí al decir que mi pe...-calló de pronto al darse cuenta de lo que iba a decir.
-Prosiga señor Malfoy ¿qué dijo la Srta. ?
Algo sonrojado se levantó de su asiento para que nadie se diera cuenta de su sonrojo, la mataría cuando estuvieran a solas.
-Nada profesora Macgonagall, puede continuar con sus acusaciones-se pasó una mano por su cara fastidiado, miro hacia el sillón que se encontraba a su izquierda donde muy callada se encontraba Hermione, que lo miraba a él desafiante. Como todo orgulloso Malfoy la recorrió con la mirada y mostró un tentadora sonrisa que la hizo estremecer-Profesora Macgonagall -la llamó-estoy dispuesto a recibir con gusto cualquier castigo que usted me coloque.
-¿En serio?-pregunto impresionada-digo-carraspeó-me parece muy maduro de su parte Sr. Malfoy, cuando sepa que castigo le daré se lo haré saber, puede retirarse a su sala común.
-Muchas gracias profesora- miró a Hermione por última vez antes de salir por la puerta con toda la elegancia que poseía un Malfoy.
"¡Qué diablos!", pensó aturdida, estaba segura de que esa mirada que le había dirigido Malfoy era una cita, ¿una cita? ¿Para donde? ... "un momento... ¿una cita? ¿O una afirmación?" ¿afirmaban que se iban a volver a encontrar?, un último pensamiento cruzó por su mente antes de que su respiración se acelerara..."¿en donde será ahora?".
