SALA COMUN

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Todo estaba silencioso, las personas con los cubiertos a medio camino de sus boca, los dejaron caer, produciendo un sonido estrepitoso en todo el comedor, sus bocas levemente abiertas miraban la escena, Malfoy ayudando a comer a Granger, Malfoy besando la frente de Granger, Malfoy expresando su cariño a Granger. ¿Ahora los monos hablarían? Pensaban sin creerlo.

Luego de que el silencio pasó, una tensión se apoderó del ambiente, los chicos que estaban cerca de Hermione, carraspearon con incomodidad e interrogaron con la mirada a Ginny, Harry y Ron, en busca de respuestas. Aunque no era su problema, la curiosidad los invadía, Will una mesa mas allá, miraba la escena entre fascinado e impresionado, estaba más que impresionado, jamás pensó que Malfoy se atrevería a confesarle delante de todo Hogwartz sus sentimientos por ella.

Harry comía con tranquilidad, ya se imaginaba que eso pasaría, tarde o temprano uno de los dos debería de ceder y admitir sus sentimientos ante el otro... "ante el otro, no frente todo Hogwartz", pensó. Que incómodo se sentía.

Ron, por su parte, estaba más enfrascado en ver la elegancia con que Malfoy cortaba los trozos de pollo. Frunciendo el seño pensó: "Desespera, ¿Cómo no se muere de hambre?"

Ginny que estaba sentada junto a Malfoy, miraba a los demás desafiante, sabía que ellos se debatían entre decir un comentario hiriente o saciar su curiosidad, harta de que las miradas se alternaran desde Malfoy y Hermione hacia ella, dijo, soltando el tenedor con fuerza:

-¿Pueden dejar de mirarlos como si fueran una atracción?-golpeó la mesa con su puño cerrado- ¡Tu, Finnigan!-exclamó señalándolo- ¡cierra la boca!, al menos que quieras que el tenedor atraviese tu garganta.

Él, turbado, cerró la boca, sonrojándose de repente. Malfoy retiró su mirada de Hermione, para posarla en las personas presentes, no le impresionó ver que varias personas los miraban impactados, unos pocos resignados y otros con enfado. Los de su casa, no podían ocultar su nerviosismo, desde la mesa de Gryffindor pudo notar como murmuraban entre ellos, pero para su impresión Blaise y Pansy comían tranquilamente.

"¿Resignándose ahora?" pensó con sarcasmo. Les devolvió la mirada cuando ellos levantaron la cabeza de sus platos. El poco tiempo que se miraron, fue suficiente para entender que estaban esperando esa reacción por parte de él, esas cosas, junto con otras, le hicieron pensar si no había durado mucho en decirlo. Miró de nuevo a su lado y depositó su vista en ella, descendió su mirada hasta sus mejillas arreboladas, comía mirando el plato, tomando los pequeños pedazos que él había cortado para ella, masticaba con meticulosidad, como si temiera ahogarse, sabía, que lo que temía, era que su estómago rechazara de nuevo la comida.

Al meterse otro pedazo de comida en la boca, levantó la mirada para posarla en él, tragó con dificultad al ver su semblante relajado, ¿Cómo podía él estar tan tranquilo, cuando ella estaba muerta de miedo? , era demasiado bueno para ser cierto. Malfoy le dedicó una sonrisa apaciguadora, tomó la mano de ella que tenía sobre su regazo y la apretó con fuerza, dándole apoyo en silencio, como solo los amantes podían hacer. Instintivamente, ella entrelazó los dedos con los de él, le dedicó una de sus tímidas sonrisas como respuesta a su silencioso apoyo.

Considerando la idea de dejar el plato como estaba, dejó el tenedor con delicadeza en la mesa, pero la mano de Draco, tomando la suya, se lo impidió.

-Por favor- pidió el- solo un poco mas- le susurró al oído- solo un poco- repitió llevando de nuevo el tenedor a su boca.

Cinco minutos después los platos de comida desaparecieron de la mesa, dando paso al postre. Hermione respiró aliviada, por un momento pensó que no resistiría tanta presión, la entrada del postre fue suficiente para que las personas que la miraban, retiraran su atención a la comida puesta en la mesa. Inconscientemente se apoyó a un costado de Draco, respirando con alivio y absorbiendo su característico perfume.

EL AMOR SECRETO DE HERMIONE GRANGERWhere stories live. Discover now