Una noche con la chica de mis sueños

Epílogo

"Serás una estrella en el cielo de algún otro, pero porqué ¿por qué no puedes ser mía?"

-Pearl Jam | Black.

Una parte de mi murió aquella noche, la simple idea de imaginar a Alice con otro chico me hacía polvo.

La amaba de la forma más egoísta que podía existir en este mundo, seguramente el chico con el que estaba no podía hacerla tan feliz como yo podría hacerlo. Me dolía la garganta de tanto resistir el llanto, Alice era jodidamente especial y no podía hacer nada porque yo le había hecho lo mismo.

La destruí el día de la graduación, después de que ella me besara me quedé pensativo un par de segundos, era cierto que la adoraba con todo el corazón, pero antes había tomado una decisión y después de todo lo sucedido, con ella, con Jafet y todos los demás, no me permití fallar de nuevo; así que tomando el mismo valor que tuve cuando decidí seguirla, me di la vuelta y sin mirarla le dije que estaba con Denisse y que con ella si podía tener algo.

Salí del jardín y encontré a Denisse en la entrada, la abracé por la cintura y nos encaminamos a la mesa donde la presenté como mi novia.

Alice observó todo desde atrás, corrió hacia la puerta trasera tomó el ascensor para subir a la habitación por su cartera, pidió un taxi y se fue hecha un paño de lágrimas.

Pasó tiempo para que pudiera volver a verla, lo poco que supe de ella fue por comentarios de mis tías y algunas referencias de parte de Caleb, solía hacer caso omiso pero se me notaba a simple vista lo mucho que me dolía, tanto que Denisse (la chica por la que dejé ir a Alice) también me abandonó para casarse con un extranjero.

Encontré de nuevo a Alice por los pasillos de la universidad, creció sin perder su esencia, seguía siendo hermosa, callada, atenta y amable; una de las más destacadas del campus gracias a sus habilidades de liderazgo, ponencia entre muchas otras.

Me acerqué mientras ella leía un libro en espera de su siguiente clase. Tomé asiento frente a ella y bajé su libro, frustrada me fulminó con la mirada y se levantó, sin embargo la sujeté por la muñeca impidiendo que se fuera y la regresé a su asiento.

— ¿Qué deseas? — Preguntó con fastidio.

—Nada, solo quería saber qué leías. — Me mostró la portada del libro y me dijo que me fuera, estaba furiosa pero lo disimulaba bastante bien, la dejé en paz, hasta que la topé de nuevo vagando cerca de las aulas de postgrado (donde yo cursaba una maestría), al parecer la estaría viendo con frecuencia.

Todos los días le insistía de maneras distintas para que comenzáramos de nuevo, tanto que terminó aceptando luego de un par de meses.

Todo era como al principio, color de rosa, con mensajes cursis, etc. Terminé por mudarme con ella luego de medio año de relación, enfrenté a mis padres y ella simplemente ya no tenía mucha relación con los suyos desde que ingresó a la universidad.

Creí haberla recuperado, pero no era así.

MENSAJE DE ALICE 4:00 PM

—Te veo en el estacionamiento en 10 minutos —Caí directo en la trampa. Para cuando llegué no había nadie en el estacionamiento, le mandé un mensaje y ella dijo que mejor la viera en casa y que en el camino pasara por pañuelos desechables.

Al llegar a apartamento me encontré con un camino hecho por pétalos de rosas y velas aromatizadas, el cual culminaba en la puerta de nuestra habitación y frente a ella me esperaba una canasta que contenía una botella de champagne y una nota que decía.

¡Sorpresa!, abre la puerta.

Hice caso a la nota y entré a la habitación con la champaña en mano y la vi. Aún duele la escena desgarradora en mi cabeza, ella montaba al chico como una experta y lo besaba con una necesidad carente de pasión. La escuché burlarse de mi ingenuidad, su risa al mirarme bien podría oírse hasta la cocina, tiré la botella y me retiré de la habitación con el corazón hecho trizas, esa era la sensación que ella experimentó cuando la dejé por Denisse; yo pude haberlo olvidado, ella jamás lo hiso.

Como reflexión solo te puedo decir que un amor y una traición como la nuestra, nunca se olvida. Al final de la historia Alice siempre será el 2° amor de mi vida, ese que no puedo poseer pero me enseñó realmente como se debe amar a una persona; no estoy seguro que para ella sea igual, casi puedo asegurar que sí. Escribimos esta historia juntos y ha llegado la hora de terminarla

No con un vivieron felices para siempre, ni algo que se le parezca, si no con un: gracias por todo, que suerte tuve de haberte enviado ese mensaje, hasta nunca.

"En tu vida solo tendrás tres amores...

El segundo te enseña el dolor y te aferras a él aunque sabes que no es para ti, el que hubieras deseado que fuera para siempre, pero te ayudó a madurar."

UNA NOCHE CON LA CHICA DE MIS SUEÑOS

STEFERINE DOMVAR.