dieciocho

30.5K 1.2K 250
                                    

»Juego de seducción fuera de incesto
»Estimulación externa
»Insinuación en el ámbito sexual
»Masturbación
»Orgasmo femenino







—Kookie ...

—¿Hmm?

Besó mis labios, somnoliento por el relajado sueño que habíamos compartido aquella noche en su cuarto. Mi cuerpo enredado con el suyo bajo las sábanas de su cama.

—¿Puedo intentar ... Provocar a Minhyuk? Quiero decir, atraerlo para que vea que no soy como él piensa. Me gustaría probarlo. Ver si ... —lamió mis comisuras, colocándose sobre mí lentamente. Parecía obnubilado conmigo, y lo amaba—. Ver si soy capaz de seducirlo con lo que me has enseñado a hacer.

—Mientras no haya beso o sexo, está bien para mí, bebé —murmuró sin dejar de besar mi rostro—. Ahora eres solo mía, pero puedes poner a mil a ese chico ... Piensa en mí cuando lo hagas, ¿sí?

—Lo haré, Jungkookie —su entrepierna se acomodó a la mía, tirando de mi lado sumiso para que este saliera a la luz—. Quiero jugar con él ...

Sonreí al ver cómo mi hermano besaba mis labios una última vez y se deslizaba bajo las mantas en silencio.

—Bien ... Porque yo también jugar contigo, hermanita.

Parada en el pasillo de mi preparatoria, recordaba la conversación previa a aquel maravilloso orgasmo del día anterior.

La verdad era que llevaba unos días dándole vueltas a mover ficha con respecto a Minhyuk y lo habría hecho aunque Kook no hubiera estado de acuerdo.
Pero, conocía a mi hermano; él no se ataba a nada ni a nadie.

Nosotros pasábamos el rato juntos, tocándonos y haciendo cosas prohibidas para personas con la misma sangre, lo cual no significaba que tuviéramos que rendir cuentas al otro si se trataba de chicos o chicas. Podíamos ligar o buscar futuras presas para cuando ya no nos divirtiésemos. Me apenaba pensar que lo que teníamos se acabaría en algún momento, pero era la realidad y había aprendido a tragarme la tristeza para poder disfrutar de la intimidad que Jungkook y yo compartíamos.

Habían pasado un par de meses desde que sus clases prácticas habían comenzado y quería probar los resultados. Comprobar si realmente podía hacer que otro hombre me miraba como lo hacía Kook ahora que tenía más seguridad en mí misma y conocía algún que otro truco con el que lograr que Minhyuk pusiera sus ojos en mí.

Y, hablando del Rey de Roma, justo mientras le daba vueltas a cómo hacerlo, apareció Minhyuk con uno de sus amigos al lado. Me había encargado de decirle a Soo que no me esperara aquel día, así que solo tenía que quedarme a solas con Minhyuk para poder empezar con mi juego.

Caminé hacia ellos a paso decidido y me detuve, cortándoles el camino a la vez que mostraba mi sonrisa más inocente.

—Minhyuk-oppa, podría ... ¿Podría hablar contigo de algo? Es ... Importante —le expliqué, sintiendo la atenta mirada de ambos chicos en mí, más precisamente en mi escote.

Lo había a propósito, así que me oculté tras un par de libros que llevaba en la mano, presionándolos contra mi pecho para dejarlos sin disfrute personal. No iba a serle tan fácil como eso. Puede que ahora quisiera que me mirara como una mujer, pero no haría nada que yo no planeara con anterioridad. El tiempo que había pasado con Kookie, había entendido que podía conseguir cualquier cosa si la tenía en mente.

—Oh, mmmm ... Sí, claro —le dio un leve empujón a Kihyun, que seguía mirándome como si fuera la primera vez que lo hacía—. Espérame fuera. Voy enseguida.

aphrodisia » jungkook |+21|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora