Padres Solteros - YoonMin

02

- Cobarde. - le dijo Jin. 

Jimin bufó e ignoró a su hermano. Seguía con su vista clavada en Min Yoongi y su hijo en la puerta del colegio. El niño estaba bajando del auto con su gran mochila y ese tipo ni siquiera se dignaba a bajarse también para despedirlo como cualquier padre amoroso haría con su pequeño. 

- Jimin, esto es patético. - insistió Jin. El hermano mayor de Jimin estaba divirtiéndose muchísimo esa mañana viendo como el rubio se escondía del policía que lo había asustado el día de ayer. 

- ¿Ah, sí? Ese niño nuevo casi golpea a tu hijo con la pelota en el recreo ¿Y no piensas hacer nada? - lo regañó el rubio.

- Hobi dice que él se estaba divirtiendo cuando Tae y el otro niño empezaron a pelear. - Jin se encogió de hombros. 

- Sabes que Tae no pelea! - exclamó - Además, la mente de 6 años de Hobi está siempre volando en otra parte. Perdóname pero no es una fuente confiable. 

- Oye, es tu sobrino. - se quejó el mayor y lo golpeó en la cabeza despacio. 

- Ouch! Yo confío en Tae y si él dice que no peleó, yo le creo. - insistió Jimin.

- Y aquí estás, esperando que el policía se vaya para ir a acosar a su pequeño hijo en la puerta de la escuela porque no tienes las bolas para enfrentarlo otra vez. - Jin echó una carcajada y Jimin lo calló para que no llamara la atención de los demás padres que venían a traer a sus hijos al colegio.

Taehyung ya había entrado así que el rubio se quedó afuera esperando que ese tal Min se fuera para poder hablar con Jungkook. Tenía que pedirle al niño que dijera la verdad para que le levantaran el castigo a su hijo. No iba a parar hasta que se hiciera justicia.

- ¿Sabes? Creo que lo que quieres hacer es ilegal. - comentó nuevamente Jin. - Acosar niños que no son tus hijos en la puerta de la escuela. 

- Ya cierra la boca. 

Jimin observó al nuevo jefe de policía arrancar su auto luego de despedirse de su hijo y decidió entonces que era momento de acercarse. 

Jungkook iba subiendo los escalones de la entrada de la escuela de dos en dos cuando un adulto se le interpuso en el camino. Alzó la mirada y se encontró con el rubio que estaba en la oficina de la directora el día de ayer. El padre de Taehyung. Lo recordaba muy bien. 

- Tú y yo tenemos que hablar, pequeño. - le dijo Jimin cruzándose de brazos.

Jungkook se sintió intimidado ante la postura y mirada del más grande. Apretó las tiras de su mochila y volteó hacia atrás en busca de su papá por ayuda. Pero Yoongi ya se había ido.

Jimin se agachó y miró al niño con tranquilidad. No quería demostrarle enojo aunque sí estaba enojado. Pero no con él claro, sino con su padre por ser tan desatento con lo que estaba ocurriendo con sus respectivos hijos. 

- Jungkook ¿Cierto? Pero qué niño más tierno eres. - lo saludó y le sonrío con sinceridad. Viéndolo de cerca en ese momento se dio cuenta de que lo pequeño que era. Era más chico que Taehyung seguro. - Soy el padre de Tae ¿me recuerdas? ¿Cómo estás hoy? ¿Mejor? 

Jungkook no contestó. Solo miro hacia el suelo, hacia sus piecitos que se movían nerviosos.

- Eres nuevo en Busan ¿verdad? Tae me contó que vienes de Daegu. Nunca he ido pero me dijeron que es una bella ciudad. ¿Es cierto eso? 

El pequeño miró a Jimin a los ojos y asintió, orgulloso de su hogar. 

- Uh, estar lejos y ser nuevo en otra escuela debe ser difícil ¿no? - continuó hablando Jimin -  Estar con chicos que no conoces es un cambio muy grande. Yo soy enfermero, trabajo en un hospital cuidando niños, y conozco bien las miradas de miedo, créeme. Está bien si esto te da miedo, es normal.