Chachachá | Emiliaco

[3] El secreto^•°'^•°|

Me dijo que se llama Joaquín. ¿Que probabilidad hay de que lo encuentre? Cuántos Joaquín hay en la ciudad, puta madre ¿Porque no le pregunté su apellido?

Llegué a lo que sería la fiesta, había solo un par de personas más por lo que le dije a textos que regresaría en un rato.

Me dormí.
Dormí mucho.

Tenía la cara hinchada del sueño.
Y hubiese seguido durmiendo de no ser por una llamada, de mi papá.

No contesté pero me llegó un mensaje.

“Emilio, recuerda que mañana te quiero a primera hora, te entregaré el libreto de las próximas tres semanas, además te presentaré a tu compañero de trabajo”

Le respondí con un, ok. Y bajé a la cocina por un vaso con agua.

La mañana parecía ser dura, con el frío arrasador que pocas veces me hacía temblar. Aún así una ducha fría siempre me reconfortaba. Me cambié y fuí directo al foro donde el señor productor me había citado.

-Te presento a Joaquín Bondoni o mejor dicho a Cuahutémoc López.
Me quedé atónito, sonreí con sorpresa mientras ahogaba una carcajada. El chico de los lunares frente a mi, siendo presentado formalmente por mi padre como mi compañero de trabajo, con una sonrisa enorme y una euforia gigantesca.

-Él es Emilio, mi hijo o Aristóteles Córcega.

-claro que lo conozco señor, es un honor para mí hacerlo por fin en persona.

¿Que? Por un momento pensé que realmente diría por qué me conoce, aunque en parte agradecía que no lo mencionara por que corría el riesgo de que recordara, mi insidente.

Según lo que había leído, ellos serían mejores amigos, Cuahutémoc, tendría un enamoramiento por Ari y eso...
Mi papá tuvo una plática con nosotros, nos planteó la idea de formar algo que se llama “aristemo” la gente había comenzado a hacer un poco de ruido cuando salieron a la luz algunas teorías. Me dijo que en el libreto original, Ari no era gay, pero que habría una gran posibilidad de que lo cambiarán. Tendría que tener mucho profesionalismo, cosa que mi padre desconfiaba.
Mi orgullo se sintió picado y le dije que no había ningún problema, es decir, si decidían hacer los cambios.

Luego de hablarlo mucho, con los productores y escritores además de Joaquín, estuvieron de acuerdo. Los escritores que estaría a cargo de la historia serían Santiago Pineda y Pablo Ferrer.
Me mantenía algo alejado de Joaquín, porque realmente me ponía incómodo que llegara a mencionar nuestro encuentro.
Intercambiaba alguna que otra sonrisa nerviosa y después el se sonrojaba, ¿No le dolía la cara?
Bueno parecía que ese color rojo no cesaba de subir a sus mejillas.  Se me hizo algo tierno, sonreí más para mí que para cualquiera que pudiera verme. Tenía mi celular en la mano y le envié un mensaje al que yacía no muy alejado de mi.

(Nuevo mensaje, Número desconocido)

Heeeeeeeeeeeeey😝
        12:20pm.
              

¿Quien eres?
                    12:21pm

Mira hacia arriba, tonto.
                  12:21pm
                  visto✔️✔️

-ah, hola Emilio ¿Que sucede? ¿Puedo ayudarte con algo?
-‎hola, emm, de hecho nada importante, solo estaba aburrido y ví que tú también ¿Como te sientes? Con respecto al elenco y eso-comence a jugar con mis manos sobre mi regazo, me había levantado para sentarme más cerca de el.
-‎pues prácticamente con el único con el que he hablado es con el señor Arath y pues contigo, de igual forma parecen llevarse muy bien todos, espero que podamos ser una familia.
-‎que bien, de hecho, yo también espero que seamos más unidos- esto último resonó en mis adentros, quería conocer al chico, ser amigos, como nos habían indicado anteriormente, aunque no tengo idea de cómo habrá sonado para el.
De alguna manera mi pulso se aceleró al no tener tema de conversación, el solo había asentido y desde entonces no habíamos cruzado palabra.