Hola, mi nombre es Jeremy, mejor conocida como Jezzarte. Bienvenido a la parte que ya nadie quiere leer porque la historia ha llegado a su termino.
Gracias por darle una oportunidad a Museo de un ángel. Esta fue una idea que quería realizar desde hacía ya mucho tiempo. Intenté escribir esporádicamente, pero a la mitad de la historia, sentía que algo faltaba así que solo paré.
Muchas veces el problema se encuentra más atrás de lo que creemos. Por lo que, cuando por fin tuve tiempo e inspiración, reescribí todo. Las cosas esta vez fueron mejor. Sentía cada palabra, cada frase.
Es verdad cuando digo que hay un cachito de mi alma en Jungkook y sobre todo, en Jimin. Así como ellos, el arte es mi vida. Así como ellos, sufrí una pérdida que tiró mi mundo abajo. Así como ellos aprendí que debía seguir adelante para honrar a mi persona.
Constantemente estoy compartiendo cosas sobre pinturas aquí y allá, pero alguna vez me dije, ¿y si esto lo escribo en una historia? ¿será interesante para alguien? ¿o sería aburrido? Al final, escribí esta historia para mí. Pero si hay alguien más leyendo esto que la haya disfrutado, de todo corazón, gracias por leer mis letras.
Daré un dato a conocer, como plus de una nota del autor. El epílogo, desde el inicio de la idea de la historia, estaba planeado para que Jungkook en su visita al cementerio, conociera a Tae y se permitiera a sí mismo volver a amar. Siento que esto hablaba muy bien de cómo es que su personaje había superado la pena y logró salir adelante, aún queriendo con todo el corazón a su ángel, pero también abriéndose de nuevo.
Al final, sentí que aquello podría ser una reflexión que podría quedar abierta. Por lo que al terminar de escribir el capítulo, simplemente decidí que sería mejor dejarlo con las últimas palabras de Jimin.
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Museo de un ángel | Kookmin
FanfictionJungkook aceptará hacerle un favor a un desconocido, lo que, muy probablemente, será la mejor decisión de su vida. Una historia para los amantes del arte, o para los amantes del amor. Ojalá le des una oportunidad. Hay un cachito de mi ser en Jungko...