~ Te amo~

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Rick acostó a Morticia en su cama, ella no se atrevía a soltarlo, se aferraba a su bata, no decía nada solo respiraba sintiendo esa colonia de Rick, él aún estaba reclinado sobre ella esperado que ella le soltara para sentarse bien en la cama.

- Puedes soltarme cariño, está bien, ya estamos en casa.

- Iba a morir Rick. - Morticia susurro a su oído.

- Tuviste miedo lo sé, pero no hay nada que temer, ahora estás a salvo.

- La cosa es... Que no tenía miedo de morir, si no de que tú murieras, de que sufrieras en ese lugar, solo, de no estar contigo cuando murieras.

Rick sintió como ella lo iba soltando hasta quedar acostada, ahora ambos se veían atentamente, como esperando que con verse pudieran decirse tantas cosas que no se habían dicho.

Rick se acercó a ella y la beso, un beso suave y tierno, y pego luego de eso su frente con la de ella, ambos cerraron sus ojos.

- Te amo. Se oyeron dos voces al unísono.

Después de esa frase corta y suave el cuarto lo inundó un silencio. Ninguno abría los ojos, por asombro, vergüenza o talvez por miedo a pensar que si lo hacían despertaría de un sueño hermoso.

Rick se acostó a su lado y la abrazo, estaban acurrucados sin verse o decirse nada pero por ese abrazo mutuo en la cama pudieron entender que sus sentimientos por el otro eran completamente correspondidos.

******** Dimensión C-137*******

La dimensión donde estaban era hermosa, un sin fin de estrellas cercanas a ellos iluminaban el cielo, una enorme nebulosa cual cúmulo nimbus de color morado iluminaba parte del cielo y esa luna en forma de diamante era preciosa.

Morty caminaba tras de Rick, no sabía que hacían en esa dimensión, acababan de salir de una angustiosa situación y ahora estaban como si nada hubiera pasado entre ellos, a él le molestaba que Rick no hubiese hablado con él de todo lo que pasó.

- Quiero ir a casa, estoy cansado Rick.

Rick sacó de su bata un pequeño cubo y presionó un botón que había en este mismo e inmediatamente se transformó en una manta con algunos cojines, bocadillos y una botella de vino.

- Siéntate entonces, mira eso lo hice para ti hace unos días.- Rick le mostraba el obsequio al adolescente.

Morty se sentó en un cojín y miro las fresas con crema que habían en una bandeja dorada, miro los detalles en cada objeto.

- Esto lo compraste ¿no? ¿Lo compraste para mi?- Morty miro atento a Rick y sus expresiones, se preparaba para una respuesta agresiva.

- No, yo lo hice para ti, y ahora te diré algo solo una vez porque no quiero repetirlo, me cuesta y lo sabes- Rick tomo aliento y miro a un lado- Morty te extrañe mucho... Lo siento, lamento todo, no merecías ese trato, fui un maldito malagradecido.

- Está bien, no te preocupes, ya pasó, estamos bien te he perdonado.- Morty se recostó en las piernas de Rick y abrió la boca esperando que Rick le diera alguna fresa o un bocadillo.

Rick tomo una pequeña fresa y la deslizó sobre los labios de Morty, luego la introdujo suavemente en la boca húmeda del menor, mientras Morty masticaba la fresa, sus labios se veían húmedos y rosas, lucían tan apetitosos y jugosos, que se acercó a besarlos.

Pero antes de que pudiera Morty giro la cabeza.

- ¿Me darías una copa de vino Rick?

Rick lo miro extrañado, no podía darle eso al chico... Aunque él era el menos indicado para negarle alguna cosa.

Rick y Morticia (Un Enredo Interdimencional) *Finalizado*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora