El cuerpo estaba muy deteriorado pero pudieron sacar muestras de ADN.Después de una exhaustiva investigación la policía forense confirmó la causa de muerte y le entregó la identidad del misterioso hombre.Hongseok en persona se lo llevó al sargento Lee y ambos miraron juntos el espeluznante resultado.
Kim Go Won.
Padre de Kim Bae.
-No lo entiendo...era una familia muy adinerada y respetada en el pueblo.No comprendo por qué alguien lo mataría.
-No fue alguien...fue su hija.-Murmura Hwitaek, revisando las fotos esparcidas sobre su escritorio.Ninguno de los dos ha dormido durante toda la noche y él podría jurar que a este punto ya se aprendió cada imagen de memoria, para su desgracia-Lo que nos falta es el móvil.
-¿Cómo estás tan seguro de que fue ella?
-Investigué.Los vecinos me dijeron que la familia parecía muy normal.La madre se enfermó de cáncer y murió cuando Bae tenía dieciséis.El hombre no volvió a casarse después de eso y era muy reservado.También mencionaron que llevaba un control muy férreo sobre su hija.Nadie más que ella podría tener un móvil para asesinarlo.
-¿Y a nadie le llamó la atención que alguien tan importante como él desapareciera repentinamente?
-Sí, lo hizo.Pero ambos, padre e hija, desaparecieron misteriosamente alrededor del mismo tiempo.Hubo rastrillajes, pero la policía local no pudo encontrarlos y la investigación se dio por cerrada.Como la chica era la única heredera de la empresa, se dividió entre los accionistas.
-Que jodido suena...-Hongseok suspira y deja caer una de las fotografías sobre el escritorio, poniéndose de pie-Necesito un café, ¿quiere uno...?
-¿Sabes lo que pienso?
El oficial suspira y se deja caer sobre la silla, intuyendo que su jefe no lo dejaría salir de la oficina por las próximas horas.Faltaba muy poco para el amanecer y el tipo aún seguía igual de despierto, viéndose como si tuviera la suficiente energía como para caminar por las paredes.
No hacía falta decir que estaba sumamente obsesionado por el caso y Hongseok creía saber la razón: quería meter a aquella pareja en la cárcel a cualquier costo.Era de conocimiento público que el sargento no había quedado feliz con la sentencia final.
A Hongseok le daba igual.Si le preguntaran (cosa que nadie hacía, nunca) él respondería que el juicio no había sido malo.En su opinión la defensa tenía un punto seguro: ambos adolescentes no estaban en sus cabales y eso era un hecho.Habían hecho cosas malas, sí.Pero no asesinaron a nadie y ninguna persona había salido seriamente herida.Desde su punto de vista ellos merecían ayuda psicológica, no estar tras las rejas.
Pero de nuevo, ¿quién era él para opinar? Sólo era un novato en la policía de Seúl y si su padre no fuera tan importante él ni siquiera estaría donde está.Todo el mundo lo decía a sus espaldas.
A él le daba igual.Quiso estudiar medicina viniendo de una familia de policías, no lo consiguió, y terminó aquí haciendo justamente lo que su padre quería que hiciera.Eso era todo.No consiguió lo que se propuso y se resignó al camino fácil: trabajar de algo que no amaba pero que se le daba bien por conveniencia.El sargento Hwitaek, por otro lado...ojalá tuviera la pasión que él tenía por su trabajo.Se podía ver a leguas que él era un hombre que realmente creía en el sentido de la justicia y que dividía el mundo en blancos o negros, en buenos y malos.No había nada tibio para él.Cuando empezaba un caso tenía que terminarlo.Por eso mismo él creía saber qué era lo que tanto lo obsesionaba con el caso de Adachi Yuto y Kim Bae.
ESTÁS LEYENDO
Trauma » Adachi Yuto
FanfictionHace tan sólo unos meses el caso de un par de jóvenes que allanaron y vandalizaron las viviendas de varias parejas adineradas de Corea sacudió a todo el país, principalmente por el carácter demencial y inexplicable de sus actos. Ahora, el sargento L...