—Ah...
«—Como quieras sólo recuerda que no puedes decirle a nadie o podrían estar en peligro...»
—Yo también lo creí... —le revolvió el cabello a su chica. Por ella daría la vida. Pero si el chico loco de la calle tenía razón debía mantenerla a salvo.
Entraron a la panadería que a esa hora ya estaba cerrada y subieron a su casa.
—Tom ya llegaron... —Sabine les recibió —Se les hizo tarde.
—Lo siento mamá... Eh...
—No importa, vengan a cenar.
Todos cenaron entre platicas alegres sin embargo, Marinette y Adrien tenían la cabeza en otro tema. En cuanto terminaron ayudaron a los señores Dupain Cheng a lavar y ordenar todo antes de ir a dormir.
—¿Aquí habías dejado ese pijama? —Adrien admiró a su novia con una pijama de pantalón rosado y blusa blanca de tirantes.
—Si, no voy a caminar por la casa con un pijama sin nada de bajo salvo mis bragas... —esa última palabra la susurro
—Adrien... —Sabine subió a la habitación.
—¡Si!
—Tu habitación está lista.
Adrien arrugo el ceño, a lo que Marinette le golpeó el brazo disimuladamente —¡Si, si! Gracias...
—Bien, que descansen chicos.
—Te amo mamá.
—Que duerma bien señora Cheng
—Con Sabine me basta Adrien, o si gustas suegra. —le guiño un ojo antes de bajar.
Las mejillas de Marinette se pusieron rojas en milésimas de segundo. Adrien la miro igualmente rojo como un tomate. —¿Por qué no duermo contigo? —Adrien hizo un puchero
—Porque no despertarías y yo asistiría a tu funeral... Además vienes diciendo eso desde hace un año y medio.
—Pero tus padres saben que vivimos juntos.
—Si Adrien... —susurró —En una casa con dos habitaciones en vez de una... Ahora ve, si no mi padre subirá a buscarte.
—Como diga y mande... —acercándose a ella la sujeto de la cintura —¿Y mi beso de buenas noches?
—Aquí... —de puntillas la peli negra le dejo un beso en la comisura de sus labios —Que descanses.
—Eso me será imposible sin ti bichito...
—Bobo, anda, ve.
Adrien a regañadientes bajo de la habitación de su novia y justo a tiempo, Tom, su padre ya estaba subiendo a verles. Cuando logró zafarse de él y de sus preguntas incomodas entro a su habitación. Tenia lo esencial, una cama y una mesa donde colocaba su celular y su mochila. Sería capaz de ir a la habitación de Marinette para dormir con ella, pero hoy realmente necesitaba pensar. Entro al baño y se puso su típica pijama. Cuando salio casi se caga del susto al ver a un chico en su habitación.
—¿Plagg?
El chico encendió la luz de la habitación y sonrío —Hola chico.
—¿Qué diablos...? ¿Cómo...?
—Por la ventana. —apuntó la ventana que daba a un costado de la calle.
—Está habitación debe tener al menos tres o cuatro metros de alto.
Plagg se encogió de hombros —Agilidad felina... En fin, vine por una respuesta y por algo de comer.
—No tengo una respuesta y nada de comer... Es más, no deberías estar aquí.
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Enemigos Mortales... | Fanfic Ladybug #1
FanfictionSinopsis: ¿Qué pasaría si... •Marinette y Adrien nunca hubieran recibido los Miraculous de jóvenes sino hasta los 20 años, mientras están en la universidad...? •Si Tikki y Plagg son personas la mayor parte del tiempo...? •Si Ladybug y Chat Noir son...