ʚ Una Mirada Más ; chenmin ɞ

5

"Porque no quiero ver un mundo sin él"

JongDae empezó a estar más cerca de MinSeok cada vez que lo veía, se le acercaba y trataba de preguntar lo primero que se le venía a la mente para escuchar su voz. Algo que a veces le hacía sentir como un idiota, en serio.

Y así durante aproximadamente un mes, lo acompañó en los descansos, mientras cambiaban de curso, le hablaba los días que compartían clases; y MinSeok dejó de ponerse nervioso.

Ahora JongDae le veía los ojos directamente sin que el contrario evitara su constante choque de miradas.

MinSeok, al igual que JongDae, trataban de disimular muy bien el revolcón que tenían en sus estómagos cada vez que sonreían, tenían contacto físico o por el simple hecho de estar cerca.

Y en ese momento como no tenía nada qué hacer; estaba en su casa, con galletas de avena mientras leía con su música a todo volumen.

Estaba tan plácidamente comiendo hasta que su celular sonó, sacándole de la burbuja relajante en la que se encontraba.

—Con quién hablo, sí me permite saber.

Una risilla de la otra linea resonó —Hola Dae, llamaba para molestar.

—Hola Min, pues cumpliste tu objetivo; me has molestado.

Otra risa. Las risas de MinSeok, amaba escuchar su risa.

—Probablemente estás encima de tu cama, leyendo y comiendo algo con tu música a todo volumen, ¿o me equivoco?

A veces, empezaba a darle miedo lo cercanos que se habían convertido, y en como lentamente sabían más cosas del otro.

—Y de seguro tú estás tirado en el piso, —se estiró en su cama —no tengo pruebas y tampoco dudas.

Silencio. Un silencio y el otro habló —Hay que hacer algo.

—Define algo, MinSeok.

—¿Ves la nubes que hay afuera?, pues es nuestra oportunidad.

—¿De morir? Creo que sigo siendo muy joven, Min —hablo con sorna, dejando su libro de vuelta al lugar donde estaba.

—Muy bien. Vas a salir y nos veremos en el parque más cercano. —Pausa. JongDae odiaba cuando de ojos color jade pausaba —te mostraré la magia de las nubes.

Y colgó. Inconscientemente obligó al castaño a buscar la magia de las nubes.

¿Con qué objetivo, si la magia ya la tenía MinSeok en cada parte de su cuerpo?

°•[☁️]•°

¿Podría usted su majestad, por favor darme la libertad?

Corrían, se lanzaban al amarillento pasto de otoño y rodaban con la esperanzas poder perderse en el gris de las nubes. Iba a llover, se podía sentir en el aire húmedo.

—La lluvia —dijo MinSeok —huele tan bien. Huele a nuevo, renovado; huele a algo perfecto.

—Petricor, es el olor de la tierra mojada luego de que llovió.

JongDae solo le mostró una sonrisa ladina mientras estiraba sus brazos para sentir de más cerca el césped. Suspiró y cerró los ojos, concentrado en la nada.

A MinSeok le encantaba la presencia de Dae— muy a parte de lo hermoso que era el castaño— la calidez y paz que transmitía eran únicas en él. A su madre le encantaría conocerlo.

Mierda, su madre.

—Vamos a mí casa —le dijo nervioso MinSeok, había olvidado avisarle a su progenitora que no estaba en casa —conocerás a mí mamá.

—Genial, subí de nivel en amistad.

El castaño se paró del césped y decidió acompañar al pelinegro hasta su casa. Las nubes seguían ahí, esperando a ser exploradas, esperando presenciar un romance disfrazado de amistad.

El camino hasta la casa de su amigo no era tan lejos como se imaginaba, unas cuantas cuadras y ya estaba en la puerta de una muy adorable casa pintada de color beige y adornada con muchas plantas.

—Todo bien —susurró el ojos color jade, aliviado—perdón, es que creí que mi mamá ya estaba en casa y, entré en pánico.

—¿No le pediste permiso a tu mamá? Vaya adolescente rebelde en el que te convertirse MinSeok.

Se rieron de lo estúpida que era la situación, de lo bonito que era estar juntos y de lo feliz que se hacían sentir los dos.

Nota de escritora(?
Lo re escribí because estaba feo la manera en la que lo había dejado.

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