ʚ Una Mirada Más ; chenmin ɞ

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"Crear arte supone estar loco y solo para siempre".

JongDae empezaba a preguntarse en qué momento se había convertido en una adolescente de novela cliché.

Así es, una vez más se encontraba frente a su armario buscando algo con lo que pudiera hacer un disfraz o que se vea bien. Rayas, no; pantalones ajustados, no; poleras y sweaters, tampoco; ponerse una sábana encima y hacer de fantasma no era tan mala idea... Pero no.

—¿Desde cuándo quieres verte tan bien? Solo ponte la sábana encima y listo, el fantasma perfecto.

HeeChul y él tenían conexión de hermanos, era evidente.

—Esta ocasión es diferente Chul, no es como antes.

No respondió, fue a buscarlo hasta el salón principal pero tampoco estaba ahí, pasó por su habitación pero nada. ¿Qué tan lejos puede ir un universitario que no hace más que molestar? Unos sonidos en la cocina le hicieron saber su paradero.

HeeChul era el único que podría ayudarlo aunque no quisiera admitirlo, siempre sabía muy bien como manejar situaciones simples tanto como complejas y eso le aliviaba.

—Ahora dime, ¿por qué tanto revuelo por arreglarse? Seamos realistas, no podrás hacer mucho con lo que tienes como ropa.

—¡HEY! Mi estilo de vestir es sagrado, no lo juzgues.

El mayor de los Kim no pudo evitar reír ante el castaño, revolviendo sus cabellos. —¿Quién es la pobre chica a la que tratas de impresionar? ¿Es igual de rubia que tú?

—Para empezar yo no soy rubio, soy castaño; y él es pelinegro —se zafó de su hermano nervioso dejándolo un tanto confundido —, y su nombre es MinSeok, que es mi novio por cierto.

—Y mira nada más, ¿que no pensabas presentarme a mi cuñado? Que descortés Chen, yo no te enseñé a ser así.

Nunca antes habían hablado de eso con HeeChul, ambos son igual de callados y no solían expresar sus sentimientos con naturalidad; a pesar de eso siempre se tenían el uno para el otro. Se abalanzó sobre él para poder darle un abrazo que correspondió al instante sonriendo.

—No debes guardarte las cosas Chennie, por lo menos no conmigo, somos nosotros dos contra el mundo entero; recuerdalo siempre.

Su hermano mayor siguió con lo suyo, sacó del horno unos pastelitos redondos con formas de ojos y le sonrió satisfecho.

—Iremos a una fiesta, ahí podrán ayudarte —antes de que pudiera refutar le tiró las llaves de la camioneta negra —, y solo por esta vez te dejo conducir.

—¡Mi fiesta es dentro de tres horas! ¿Qué pueden hacer por mí un montón de universitarios?

—Te lo dirá TaeYeon, ¿vienes o no?

Tuvo que aceptar a regañadientes, lo ayudarían y no se podía quejar de eso.

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"Porque los deseos se piden a la cara y no a las estrellas".

Cuando MinSeok entró a la secundaria juró nunca meterse en problemas; y ahora estaba en precisamente uno de ellos.

—Sigo sin creer que no hayas venido vestido de Harry Potter, ¡es una vergüenza! No soy muy fanático pero lo tienes todo, el cabello negro, usas lentes , ¡Y TIENES LOS OJOS DE TU MADRE!

—No tomaste en cuenta que Harry Potter no es coreano por lo que veo; además yo soy de Ravenclaw.

—¿Y ESO ACASO IMPORTA? No me mires MinSeok, me siento decepcionado.