La comisión de investigación se apersona en la finca perteneciente a Antonio Gutiérrez - el Andaluz, comienzan a realizar un estudio minucioso de todos los espacios enfocándose en la plaza de toros personal que se encuentra dentro de las instalaciones de la finca ganadera. Los agentes consiguen la colaboración de los empleados en la búsqueda y rastreo, aprovechando que el dueño se encuentra fuera del país, hallando más restos de tejido de los guardias depositados en las barreras y en el área de toriles.
- Jefe tenemos algunas muestras ya, - El agente Alonso mostrando un recipiente. -voy a enviar al laboratorio para su análisis.
- Muy bien. – Vega se agacha en el centro de la plaza, recoge un poco de arena en la mano refiriéndose a los agentes García y Fernández. - siento que estamos en el sitio indicado, más el lugar es solo un escenario donde ejecutan el acto, aquí sucede algo atroz, son batallas al estilo del coliseo romano, no sé si me explico; podemos ver que hay evidencias de que nuestros desaparecido estuvieron aquí peleando por sus vidas sin éxito, nuestro asesino en realidad son dos o más, ahora todo tiene sentido, verán los hombres que seleccionan tal vez son los que tienen algún enfrentamiento con ellos o problema, en el caso de los guardias el venezolano y el marroquí fue una venganza, los secuestran, los traen aquí para ejecutarlos pero a su estilo, o sea en un corrida pero no de toros sino "una corrida de humanos", siguiendo la tradición romana de gladiadores, es algo no nuevo pero muy sangriento, Miguel hacia el trabajo sucio y el Andaluz se encargaba de torearlos y con la espada estocarlos.
- Por eso es que aparecen tantos rastros de tejidos, - en un acto de imaginación la agente Fernández describe lo ocurrido. -quiere decir que usaron banderillas, eso explica que los rastros de sangre se esparcen por lugares discontinuos en la arena, las víctimas fueron forzadas a seguir el capote y la muleta mientras morían lentamente, al estar desangrados caían de rodillas y es el momento del estoque.
- Jefe siempre has tenido la razón, el asesino es coleccionista. Atando cabos Alonso concluye. - la parte superior de los cuerpos del matadero, no aparece porque fueron cortados y disecadas como trofeos, al estilo de las cabezas de los toros, como las que tiene el andaluz en su sala, y el niño Jorge no tiene las orejas porque fueron dadas a su asesino como premios por la faena.
- Eso es correcto, pero acabas de decir algo muy importante. ¡Como las que tiene el Andaluz en su sala!, estamos buscando en el lugar equivocado, debemos buscar en la casa un salón de trofeos, estoy seguro que es una puerta secreta o un sótano.
Todos salen de la plaza y se apresuran para llegar a la casa principal, proceden a buscar en los cuartos y sótanos pero no consiguen rastros de ese salón secreto, llega la noche y se retiran de la propiedad con la firme idea de que están cerca de resolver el caso, pero esta vez su olfato ha fallado.
En el medio de la noche el agente Alonso en su cama sigue analizando todo el caso, en su mente comienza a penetrar la de los asesinos, haciendo ejercicios mentales como los de su jefe y compañero, se le ocurre una idea, se levanta rápidamente de su cama, comienza a vestirse, toma su celular y comienza a llamar a Vega.
El teléfono de Vega suena pero este está ocupado en una faena pero de tipo sexual, por un momento hace caso omiso del celular pero ante la persistencia de su compañero, decide dejar a un lado a la mujer y contesta, con voz agitada por la obvia razón.
- Espero sea importante
- Ya sé dónde está la sala oculta, en donde estas voy a pasar a recogerte, debemos ir a la finca.
- Déjame ver la hora, son la una de la mañana... está bien buscarme en la avenida universidad con palomares
- ¿Qué? No lo puedo creer estas con Rebeca
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LA HERMANDAD DE LOS TOREROS
Misterio / SuspensoUna serie de asesinatos y desapariciones suceden en la ciudad de Madrid, un grupo de toreros se ve involucrado exponiendo al mundo de la tauromaquia y una sociedades secreta que durante siglos a estado en el anonimato sale a la luz de las autoridade...