El Andaluz

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     Tras notificar el hallazgo todo un equipo de la brigada de homicidios y desaparecido acordonan el lugar, el comisario Mauricio se reúne con los agentes Vega y Alonso los cuales están sentados en un borde de madera a las afueras de la casa donde acaba de hallar la abominable habitación.

- "En una habitación, todo siempre comienza en una habitación", - les dice el comisario mientras se acerca a los agentes. -los felicito agentes, su olfato refinado dieron con este lugar, la municipalidad les estará siempre agradecidos por su excelente trabajo, compromiso por la justicia y la paz, sabía que no me iban a defraudar, por un momento lo dude, pero no lo hicieron, la sociedad podrá estar de nuevo segura gracias a sus esfuerzos.

- Gracias señor, -responde Alonso mientras que junto con Vega se ponen de pie. – no fue fácil y fue complejo pero siguiendo las enseñanzas de mi compañero hicimos un equipo perfecto y logramos resolver parte del misterio.

- Porque dice parte del misterio agente. – el comisario mira a los dos.

- Señor como sabrá esta propiedad es del Andaluz, él se encuentra ahora en Francia como parte de su temporada, debemos de detenerlo antes de que sepa todo lo que paso aquí y se fugue.

- El Andaluz es el complemento de Miguel, - interviene Vega que hasta ahora estuvo sumido en sus pensamientos. - entre los dos realizaron todos los asesinatos, así que debemos actuar lo más rápido posible para capturarlo, los medios de comunicación son más rápidos que la justicia y si no lo detenemos mientras este en la jurisdicción de la comunidad europea puede irse a América o a Asia y lo perderíamos para siempre.

- Entiendo voy a comunicarme con nuestros par de Europol en Francia para detenerlo lo antes posible.

- Señor nosotros queremos ser los que lo detienen, envíenos por favor

- Creo que con este hallazgo se han ganado ese derecho prepárense, deben de salir de inmediato.

    Luego de varias horas de viaje se encuentran en Bayona, ciudad del departamento francés de los Pirineos Atlánticos, región de Aquitania, ya son las 4 de la tarde y la corrida está por comenzar, el cartel de La Plaza de toros anuncia la presencia de 3 toreros de talla mundial, los españoles Guillermo Sánchez "el guille", Antonio Gutiérrez "el Andaluz" y la joven figura francesa el Abel Bellerose. La plaza está repleta sus casi 10 mil asientos de sol y sombra están ocupados, es una tarde de verano con un sol radiante.

    El primer toro sale al ruedo, como es la costumbre es para el más antiguo de los matadores por lo tanto abre la corrida el Guille. Los agentes ya en los alrededores de la plaza, pero el tráfico limita la modalidad Alonso mira el reloj

- Pero que ostias con este tráfico ya son las cuatro y la corrida empezó, no vamos a poder detenerlo sino hasta que salgan.

- Tranquilo Alonso, no asuste a los franchutes sino nos dejan botados aquí.

    Todo fue complicado al llegar a la plaza los agentes se percatan que ya van por el 3 toro de la lidia y en el tercio de banderillas, deciden buscar un puesto donde se pueden ubicar, se trasladan por el interior de la plaza hasta ubicarse junto a la comisión de Europol y policías en los tendidos de sol, al ubicarse el Guille nota la presencia de los agentes, con el codo llama la atención del Andaluz así como la de su cuadrilla, la tarde fue pasando y mientras el público disfruta, la policía acordona el sector de la plaza y ubica policía en cada una de las puertas reduciendo a cero las posibilidades de un escape por parte del asesino serial, más peligroso y astuto de la historia española.

    El quinto toro sale al ruedo, es de la ganadería Aimé gallón e hijos, con un peso de 512 kg de nombre Risueño, cenizo de capa, bien armado el mejor ejemplar de la tarde, los agentes observan como entra con el capote el Andaluz se coloca en el centro de la plaza y va rodillas a tierra el toro acude con envestida y termina en corto, el público aplaude el pase, el andaluz está decidido a realizar una de sus mejores faenas así que decide mostrar todo su repertorio, va con quite por gaoneras, prepara una serpentina , la combina con una chicuelina, realiza una verónica y termina la serie con una media verónica, el público agradece la exhibición con aplausos, el presidente da la orden y suena el clarín anunciando el tercio de varas, las puertas se abren y entran los picadores, se ubican en las correspondiente rayas de cal, el toro enviste el peto del caballo y la vara es clavada con generosidad en el cuero del animal, el público abuchea el exceso de tiempo y la acción de la vara, el picador usa toda su experiencia para desenganchar al toro, los subalternos lleva al toro al despeje y lo colocan en posición para la segunda vara que se tiene preparada, el picador hace el llamado a la bestia la cual vuelve a golpear el peto del caballo y la vara es enterrada nuevamente en el morrillo del toro, la sangre fluye por las patas del animal la suerte de varas ha terminado, el andaluz vuelve a cargar con el capote, hace el llamado del animal el cual asiste a su encuentro, esta vez hace el lance del farol, lo combina con una lopecina o zapopina y vuelve a terminar con una verónica, el torero se emplea a fondo con sus series, el animal responde con fuerza y entereza, la lidia está en su cúspide y ahora vuelve a sonar el clarín que anuncia el tercio de banderillas.

     Tres pares están dispuestas una de la cuales ha pedido el andaluz que desea colocar, por ser el mayor será el primero se ubica con las banderillas en la mano las cuales están adornadas con la bandera de España y de Andalucía, con el movimiento de al sesgo introduce el par de una manera perfecta la tarde es suya y se ve indetenible, los subalternos colocan los dos pares restantes también con éxito, por tercera vez suena el clarín ahora es momento del tercio de muerte, el Andaluz camina de forma teatral hasta el centro de la plaza, se quita la montera y da un giro dedicando la corrida al público, seguidamente camina hacia un costado de la plaza se coloca en frente de los tendidos de sol ve fijamente a los investigadores que están entre el público, con un gesto de desafío les arroja la montera, Vega como una reacción natural la toma, la suerte está echada, este ritual es símbolo de dedicación del toro, la corrida continua, ahora su mozo de espada le da la muleta y la espada, el matador se dirige con sus trastos a los medios con decisión, lo reta al natural con su energía llama a su rival el cual enviste metiendo la cabeza como un símbolo de calidad y nobleza, el torero despliega nuevamente su sapiencia con pases de remembranza, molinete, Bernardina, de inmediato cambiado por la espalda y para cerrar la serie molinete de rodillas, el olee, es el idioma que se habla en las gradas, todos desde sus asientos disfrutan del espectáculo, el matador ya sabe lo que le espera al finalizar la faena, antes de salir al paseíllo supo todo lo de Miguel y los hallazgos en su finca, sabe que está condenado al olvido en el fondo de una prisión y que los policías vinieron por él. Es ahí en ese momento que los grandes se hacen leyenda, en los momentos que sumados redefinen su propia historia, el andaluz se acaba de convencer de cómo desea terminar, es ahí cuando voltea y mira a su hermano de la vida el Guille, con su cabeza asienta y como buen amigo le responde, ¡sus ojos son de despedida!, ahora observa en los tendidos a Vega que se convirtió en su juez inquisidor, en la arena no se perdonan las distracciones y más a conciencia, es así como siente la furia del toro que introduce el cuerno en su abdomen perforando el páncreas y el hígado como una espada perfora el morro hasta llegar al corazón del animal, el Andaluz es estremecido por media tonelada de violencia y poder, lo carga por unos metros entre su frente para restregarlo por ultimo en la arena, dejándolo moribundo, los subalternos corren a su rescate, todos en la plaza reaccionan ante el violento hecho, se escuchan gritos y lamentos, pero el torero no siente temor, ni autocompasión, al contrario se goza sus últimos minutos de vida y de gloria.

    En el burladero el Guille permanece inmutable como el que sabía lo que iba a suceder, en las gradas Vega es inmovible como el que sabe cuál es el futuro inmediato, en el burladero el Guille sabe que pierde a un buen amigo y cómplice, pero el mundo gana a un nuevo héroe, en las gradas Vega sabe que pierde a sus principal sospechoso y potencial asesino pero gana la satisfacción del deber cumplido.

LA HERMANDAD DE LOS TOREROSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora