¿Siempre Juntos? (Segunda Temporada de Escape) » Min Yoongi

Capítulo 18.

A la mañana siguiente despierto aún abrazada a Yoongi, vaya, me siento mucho mejor, ya no tengo esos horribles dolores, miro a Yoongi, sigue dormido, lo sigo abrazando escondiendo mi cara en su pecho. Al rato, Yoongi se despierta, lo se porque acaricia de nuevo mi cabello.

—¿Estás mejor?

—Si, estoy mejor.

—Menos mal. —sonríe.

Lo miro y sonrío, el me abraza también. Al poco tiempo, el doctor entra, Yoongi se separa rápidamente y decide sentarse en la silla a mi lado.

—Buenos días, ¿cómo está hoy, señorita Park?

—Estoy mejor, ¿cuándo podré ir a casa?

—Te haremos unas pruebas para comprobar si todo está bien y podrás irte si los resultados salen bien.

Asiento, me hacen las pruebas y mientras que esperamos a los resultados miramos un poco la tele, Yoongi sigue en la silla, dándome la mano. Pasa un tiempo, entra de nuevo el doctor.

—Bueno, parece que está todo bien, ya puedes irte.

—Gracias doctor.

El doctor asiente y se va.

—Creo que tendré que volver a casa en bata de hospital.

—Te queda bien. —sonríe.

Mis mejillas se sonrojan y casi susurrando le digo:— Gracias...

Su sonrisa se agranda, me da la mano, agarro mi ropa y salimos agarrados de la mano, subimos a su coche y me lleva hasta mi casa.

—Yoongi, gracias por todo.

—Haría lo que sea por ti, siempre voy a estar para ti, siempre estaré cuidándote, aunque al principio te ignoré, yo siempre estaré para ti, siempre. ¿Recuerdas cuándo empezamos a salir y prometimos estar siempre juntos? Lo cumpliré, quieras estar de nuevo conmigo o no, lo voy a cumplir. —dice seriamente.

—Min Yoongi, ¿por que eres tan lindo?

—Tu eres linda. —sonríe.

—Tengo que decirte que, en realidad yo estaba con Seongjin por no estar sola, porque el estuvo cuando tuvimos que romper, pero en realidad nunca te saqué de mi cabeza, tal vez utilizarlo para olvidar lo mal que me sentía está mal, pero por fin vuelves a estar aquí conmigo, no te dejaré por nada del mundo.

Al escuchar eso se acerca lentamente a mi y me da un cálido beso que no tardo en corresponder.