ᴇʟ ᴄᴏ́ᴅɪɢᴏ ᴅᴇʟ ᴍɪᴇᴅᴏ. | ᴀᴛᴇᴇᴢ.

una semana después.

desde aquella reunión en donde san terminó llorando junto a hongjoong, ninguno se dirigía siquiera la mirada.

el miedo los estaba matando, pero la cobardía era mucho más fuerte, querían vivir y al mismo tiempo dejar de vivir tal pesadilla.

mingi, parecía estar en una especie de burbuja, no sabía lo que pasaba a su alrededor y ni siquiera era capaz de llegar a alguna puerta sin tener un ataque de nervios; estaban mal, pero tampoco era como si quisieran hacer algo para detenerlo.

sabían que era su vida la que a peligraba, la de sus familiares también, eso los mantenía en un miedo profundo.

seonghwa ya no abría su casillero.

wooyoung llevaba consigo una navaja y un crucifijo de plata colgando en su cuello.

san lloraba todo el tiempo y su mirada siempre estaba perdiéndose en algún punto.

hongjoong llevaba ese semana sin ir a clases, supuestamente enfermo.

yeosang no hablaba con nadie y había cambiado de casillero con otra persona.

jongho simplemente se volvió más agresivo, pensaba que cualquiera era aquel bastardo.

y yunho, él ya no sonreía, desde aquella vez que vió a mingi tirado en el suelo, aquella sangre que brotaba de este y esos números otra vez; se encerro en su propio mundo, evitando todo, inclusive a keonhee.