Prólogo

48 8 0
                                    

No es posible que semejante hombre sea hecho bajo tanta majestuosidad, más bien fue creado bajo un concepto de belleza demoníaca. Con ese semblante autoritario y dominante que hace temblar y derretir a cualquiera, con esos ojos profundos y celestes que podrían cazar un ciervo sin hacerlo protestar y que caiga sublime a sus pies. Tratar de ver más allá de él, evitar tratarlo como un misterio, sería un completo error, pues, ¿quién no desea atravesar los márgenes prohibidos que nos establece un individuo? Me pregunto que será de mi, haciendo la excepción en toda su definición de límite, rompiendo todas las barreras que están frente su alcance y el mío, quisiera saber que se siente que esos labios provoquen un lío existencial que nuble mi fragilidad sensitiva haciéndome temblar.

No es posible que él, entre tanta frialdad sea la vivacidad que encandile toda una multitud. Es perturbador que me sienta intimidada por semejante patán, haciendo que sienta lo inimaginable y alterando todos mis sentidos quedando totalmente aturdida. Supongo que hay muchas reglas por romper cuando se trata de sus límites, ¿Hacer que un narcisista se enamore de alguien que no sea el mismo? Supongo que es como enamorar al diablo.

El Infierno Tiene Tu Nombre.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora