Capítulo 48: El mar me llama.

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Desperté rato después, me sentía más cansada que cuando me dormí, mi cabeza seguía apoyada en el pecho de Grover y Percy aún no soltaba mi mano.

"Tal vez...Aunque no los escuche muy bien.", escuche que murmuro Percy.

"Eso suena como la sala del trono de Hades", dijo Grover. "Esa es la forma en que suele describirse."

"Algo anda mal. El salón del trono no era la parte principal del sueño. Y esa voz de la fosa... No lo sé. Simplemente no se sentía como la voz de un Dios". Qué?, pero ahora de qué diablos hablan?.

No me atreví a abrir los ojos, ni siquiera me moví.

"¿Qué?" Pregunto mi hermano.

"Oh... nada. Yo estaba... No, tiene que ser Hades. Tal vez él envió este ladrón, esta persona invisible, para obtener el rayo maestro, y algo salió mal..."

"¿Cómo qué?"

"Yo... Yo no lo sé." dijo ella. "Pero si se robó el símbolo de poder de Zeus del Olimpo, y los dioses trataban de cazarlo, quiero decir, un montón de cosas pueden ir mal. Así que este ladrón tenía que ocultar el rayo, o él lo perdió de alguna manera. De todos modos, él no pudo llevarlo a Hades. Eso es lo que dijo la voz en tu sueño, ¿verdad? El hombre fracasó. Eso explicaría lo que las Furias estaban buscando cuando fueron tras nosotros en el autobús. Tal vez pensaron que habíamos recuperado el rayo." Sueño!, hablan de lo que soñó Percy en el camión por lo que no despertaba.

Una sensación de miedo comenzó a llegar pero me centre en alejarla para que Percy no se diera cuenta que ya estaba despierta.

"Pero si yo ya hubiera recuperado el rayo." dijo, "¿Por qué habría de estar viajando al infierno?"

"Para amenazar a Hades." Grover sugirió. "Sobornar o chantajearlo para que te devuelva a tu mamá."

Silbo. "Tienes pensamientos malos para ser una cabra. Pero la cosa en la fosa dijo que estaba esperando dos cosas."

"Si el rayo maestro es uno, ¿Cuál es el otro?", respondió Annabeth.

Cosa de la fosa?

"Soñaste con Hades?", no lo soporte y pregunte con la voz aun ronca, sentí como los tres pegaban un brinco.

"Estas despierta!", hablo-grito Percy.

"Algo así... soñaste con Hades... es malo, verdad?"

"Bueno normalmente los héroes predicen de alguna forma por sueños el futuro, así que si Percy soñó con Hades, o algo así... no creo que sea precisamente bueno", me contesto Grover con tono conciliador.

Annabeth me miraba como si supiera mi siguiente pregunta, y fue el deseo silencioso de no preguntarla.

"Tienes una idea de lo que podría estar en esa fosa, ¿no?" Pregunté. "¿Quiero decir, si no es Hades?"

"Beth... no vamos a hablar de ello. Porque si no es Hades... No tiene que ser Hades. Y tu hermano ya tiene suficiente." Y con eso dio por terminada la conversación.

Esto es demasiado, si no fuera porque el idiota es mi hermano estaría en el campamento con Luke... Luke, no le veía ya desde hace días y sentía que fueron años. Le he tomado demasiado cariño, como para no sentirme decepcionada porque no esté aquí, la compañía de Grover me gusta pero sé que me quiere como una pequeña hermana, y yo lo quiero igual. Y Percy, bueno Percy a veces siento que me quiere y otras que su enamoramiento por Annabeth le supera. Porque sí, estoy segura que está enamorado con perdición de ella... que horror de cuñada!

Pasando por Wasteland. Pasamos un cartel que decía: LÍNEA DEL ESTADO DE CALIFORNIA, 19,31 kilómetros.

Annabeth y Percy comenzaron a sugerir estrategias inteligentes para entrar en la Tierra de la Muerte, pero mi mente no les seguía, no dejaba de convencerme que hacia esto por Sally, porque si fuera mi mamá, haría lo que fuera. Pero tenía mucho miedo.

El taxi aceleró al oeste. Cada ráfaga de viento a través del Valle de la Muerte sonaba como un espíritu de la muerte. Cada vez que los frenos silbaban en un camión de dieciocho ruedas, me recordó la voz reptil de Equidna.

Al atardecer, el taxi nos dejó en la playa de Santa Mónica. Tenía exactamente la forma en que las playas de L. A. se veían en las películas, sólo que olía a podrido. Hubo juegos de carnaval que recubrían el muelle, con palmeras que bordean las aceras, chicos sin hogar durmiendo en las dunas de arena, y chicos surfistas esperando la ola perfecta.

Grover, Annabeth, Percy y yo caminamos hasta el borde de las olas.

"¿Y ahora qué?" Annabeth preguntó.

El Pacífico se estaba convirtiendo en oro cuando el sol se ocultaba.

Pensé en la última vez que vi un mar parecido, y lo primero que vino a mi mente fue el mar enfrente de la cabaña de Percy cuando el minotauro nos seguía. Es increíblemente difícil de creer que era hija del dios que controlaba esto. Mi vida cada vez parecía más un libro de fantasía.

Vi a Percy moverse a las olas, y no dude en seguirlo, sentía que debía hacerlo.

"¿Percy?" Annabeth dijo. "¿Qué están haciendo? Beth!"

Seguí caminando, hasta la cintura, entonces mi pecho.

Ella grito: "¿Saben cuán contaminada está el agua? Hay todo tipo de tóxicos..."

Ahí es cuando mi cabeza se hundió.

No me moleste en tomar aire, sabía que podría estar ahí como en tierra, era hermoso, pese a la oscuridad y que estaba bajo agua, todo era hermoso, me sentía en paz.

Podía sentir la textura ondulada del fondo. Podría hacer colonias de dólares de arena que salpicaban los bancos de arena. Podía ver las corrientes, corrientes calientes y corrientes frías girando juntas.

Busque la mano de Percy y sonriendo lo abrace, hasta que sentí como se apartó bruscamente, no voy a negarlo me sentí herida. Y ahora que pasaba?

Miré hacia abajo y casi me tiro fuera del agua con mi hermano como un misil balístico. Deslizándose por un lado de Percy estaba un tiburón mako de cinco pies de largo.

Intente moverme para salir, pero estaba paralizada, me llevo varios minutos darme cuenta que esa cosa no estaba atacando. Se acurrucaba con Percy, y creo que buscaba mi contacto también.

Como un perro. En principio, toco su aleta dorsal. Se resistió un poco, como si lo invitara a sujetarlo más fuerte. Agarro la aleta con ambas manos. Y yo aún sentía mi corazón a nada de salir de mi pequeño pecho.

Era fascinantemente horrible, sentía necesidad de tocarle, pero me aterraba que de pronto nos atacara.

Me llevo varios minutos animarme a tocarle, minutos en los que Percy no dejo de jugar con él como si nada. Pero si soy sincera me arrepiento de haberlo tocado.

Porque una vez que le sujete, salió disparado con Percy y conmigo sujetados con fuerza. Lo sabia! Mala idea! No se confía en los tiburones!!!

La hermana de Percy Jackson.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora