Seduceme II Joel y tú II TERMINADA

II Capitulo 11 II

-Tal vez-dijo él-no hace falta brindar para que las cosas se hagan realidad.

-Sí...-Contestó vergonzosa.

Ella bajó la cabeza para ocultar la confusión que le provocaban las sensaciones que experimentaba con Joel, pero entonces vio un movimiento detrás de él.

-Periodistas a la derecha-informó, entre dientes.

Él maldijo, acabó su bebida y dejó la copa vacía en la bandeja de un camarero que volvía a pasar por allí antes de escabullirse de los fisgones.

Se acercaron a la orquesta, que estaba tocando sobre el escenario donde él se subiría más tarde. Las luces se apagaron, y al menos diez bolas de discoteca bajaron del techo, girando y lanzando rayos de luz a todas las esquinas.

-Disfrutad de la hora de música disco-Dijo el director por el micrófono-A las ocho en punto pasaremos al pop de los ochenta y continuadamente, tendremos a CNCO en el escenario.

Los asistentes se animaron, se oyeron gritos eufóricos provocados por chicas y mujeres. La pista de baile se llenó en cosa de segundos.

_____ vio las luces de colores y a la gente que empezaba a moverse al ritmo de las canciones y se le hizo un nudo en la garganta. Esperaba que Joel no pretendiera que bailara con aquellos tacones y con aquel vestido tan estrecho. Por suerte, él se detuvo al borde de la pista.

-Creo que aquí estaremos a salvo-dijo-Deprisa, mírame a los ojos como si fuera el único chico del lugar. Tal vez eso los mantenga alejados.

Ella rió, pero lo miró a los ojos obedientemente.

-¿Cómo si fueras el único chico? ¿Y cómo se hace para mirar de esa manera?

Él parpadeó y se unió a las carcajadas.

-La verdad es que no tengo ni idea.

____ hizo una mueca de dolor.

-Lamento decirte que se acercan tres hombres con trajes baratos y armados con cámaras.

-Mierda.

Joel la tomó de la mano, la arrastró a la pista de baile y se volvió a mirar a los fotógrafos. Richard se apresuró a interponerse para obstaculizar la toma, y le guiñó un ojo a sus amigos.

-Así está mejor-le dijo Joel a ____, sonriendo.

Estaban rodeados de parejas que giraban al compás de la música.

-A menos que se te ocurra cómo podemos salir de aquí-advirtió ______-tendremos que bailar.

Ella podía remontar cualquier ola con la tabla de surf o cantar a voz en grito en la barra del café cuando estaba de buen humor, pero era incapaz de bailar. No tenía ritmo.
Con una delicadeza estremecedora, Joel le pasó un brazo alrededor de la cintura, le tomó la otra mano y la atrajo hacia sí.

-Por mí, bailemos.

-Espera...-Exclamó ella, mirándolo a los ojos mientras él empezaba a moverse en perfecta sincronía con la música-¿Sabes hacer esto?

Él sonrió divertido.

-¿Por qué te sorprende tanto?

_____ tenía entendido que los cantantes no solo eran buenos con la voz, sino que tenían buen ritmo, pero lo que tenía Joel era mucho más que eso, y sus movimientos la afectaban de una manera inesperada.

-¿Qué pasa?-Preguntó él, al ver que se quedaba quieta.

Lo único que pasaba era que ____ se sentía *******. Ni en sus días de desenfreno se había sentido cómoda bailando. Nunca le había gustado. Sin embargo, estaba entre los brazos de un chico muy atractivo que centraba su atención en ella para tratar de olvidarse del mundo que los rodeaba, y _____ quería ayudarlo. Estaba dispuesta a hacer lo que fuera, menos bailar.
Joel agachó un poco la cabeza y le rozó la mejilla con la barbilla.

-¿_____?

Ella lo miró a los ojos. Podía sentir la fortaleza del cuerpo de Joel, cómo le latía el corazón y la presión de la cadera que se balanceaba suavemente contra la suya; y también, las reacciones de su propio cuerpo, las hormonas revolucionadas, los huesos derretidos.

-¿______? ¿Estás ahí?

-Sí, pero es que bailar me parece algo muy trillado.