Es Un Secreto Amarte - KookTae/TaeKook - (?)

Vámonos, Hyung

- ¿Donde demonios esta? - Sus piernas tenían ese clásico tic nervioso que las hacía temblar y sus ojos viajaban por toda la entrada del colegio durante la hora de salida.

- ¿Quien, Jungkookie? - Preguntó la joven pelinegra estando a un lado de su novio.

- A Taehyungnie Hyung - Observaba el rostro de los alumnos y luego las diversas cabelleras masculinas, en busca de la única en color rojo, pero nada.
Taehyung no aparecía y ese día ambos salían a la misma hora como siempre.

- Oh, Taehyungnie Hyung, que extraño que no te dijera - Hablo elocuente la chica.

- ¿De qué hablas? - Giró lentamente su cabeza ligeramente confundido ante la frase de su novia.

- Yo lo vi salir hace poco de su aula hoy - Fruncio el entrecejo levemente - Al parecer, Hyung se dirigia al salón de danza, iba bastante rápido y con el celular en su mano - Llevo su dedo indice a la comisura de sus labios presionándolo - Llevaba la mochila puesta así que supongo que se estaba por ir luego de hacer algo en el salón -

- ¿Porque no me lo dijiste? -

- Porque son mejores amigos, Jungkook, pensé que te lo había dicho de antemano, y tu tampoco me preguntaste - Abulto sus labios e infló sus mejillas junto con el ceño fruncido en un intento de parecer molesta, pero resultó tierno para cada una de las personas que la vió.

- Lo siento... - Suspiro frustrado por culpa de su propia terquedad - Ya vengo ¿Si? Esperame, iré a buscarlo, talves todavía está allí - La más bajita asintió con una sonrisa ligera y lo saludo agitando la mano antes de que este se fuera. Habian arreglado para encontrarse en el parque con los demás amigos de su curso.

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Jungkook estaba corriendo por todo el pasillo camino al lugar donde el club de baile practicaba. La escuela en si estaba vacía, era casi imposible que Taehyung estuviese todavía allí, pero era mejor cerciorarse.
A medida que se aproximaba a la puerta de madera oscura, lograba, apenas, escuchar una melodía dulce y lenta, como si fuese un ritmo más para una danza clasica que de hip hop proveniente de ahí.

Se negó a entrar de forma imprevista ya que hubiese sido raro que la abriera abruptamente cuando alguien desconocido estuviese ahí. Seria muy incómodo.

Miro por la ventanilla que cubria la mayor parte de la parte superior de la puerta y dejaba la vista libre hacía el interior de la habitación, poso sus pupilas en el medio de esta, allí vio a una silueta reconocible, un chico, pero de cabellera rubia.
Aquel con los mofletes rechonchos y estatura baja se encontraba parado sonriente viendo y extendiendo sus brazos al frente en señal de invitación.

Observo a quien se lo dirigía, a Taehyung.
El pelirrojo se encontraba sentado en una de las bancas y a la vez veía a Jimin con confusión, al parecer había llorado, puesto que se limpiaba la nariz con la manga de su suéter.
Quiso entrar para llevarse a su Hyung pero el mayor de todos comenzó a hablar y sus ganas de escuchar de lo que estaban por hablar ganaron.

- Vamos TaeTae, ven a bailar - Insistió con una afable sonrisa.

- Sabes que no estoy para eso, Hyung - Recalcó el nombrado con la cabeza gacha mientras movía sus pies de lado a lado con las piernas estiradas.

- ¿Cómo no vas a estar de humor para bailar? Con el baile se es capaz de expresar todo tipo de sentimientos, Tae -

- Pero no tengo ganas, además, no bailo bien - Argumento, ahora observando la insistente posición del mayor.

- Si no lo intentas, no sabrás si en verdad no tienes ganas y no bailas bien... Hazme caso...Mi abuela decía que uno puede ser feliz cuando encuentra la manera de liberarse de todo lo malo - Mencionó sonriente - ¿Tu quieres ser feliz? -