HOSEOK

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Dos días después

En la estación:

El pelinaranja ya se encontraba un poco familiarizado con los pasillos de aquel sitio, aunque no recordara la ubicación de la oficina, este sabía perfectamente hacia dónde ir.

— ¡Ya estás aquí!— habla Jin con mucho ánimo.

— Tál y como lo pidieron— sonrió amablemente el joven.

— Si gustas, puedes ir pasando al salón de interrogatorios, mientras yo busco a Jimin— propuso el pelinegro, por lo cual, Hoseok asintió.

— Está bien— logró mencionar este, antes de que el contrario se retirara.

A pesar de todo, el mayor no avanzó mucho. El comisario se encontraba a unos cuantos metros de ellos abrazando al joven Min, a pesar de estar a la vista de todos, se veían muy encariñados.

— No es por interrumpir...— comenzó a hablar Jin con incomodidad, pero no terminó su dicho, pues el solicitado se percató de la presencia del joven recién recuperado.

— Yoongi... ¿Me puedes esperar?— el rubio se giró a su amado en espera de respuesta.

— Sí, estaré en tu oficina— afirmó el pelinegro, dejando un beso fogoso en los carnosos labios del joven Park.

Decir que era incómodo es corto, pues el superior se encontraba sonrojado hasta las orejas, y el pelinaranja solo jugueteaba con sus dedos.

— Estamos en el trabajo— carraspeó Jin, antes de retirarse de ahí a paso apresurado.

— Disculpa lo que viste...— el comisario se rascaba la nuca con un poco de vergüenza.

— No importa— el chico amable volvió a sonreír.

— Continúa— Jimin le señala aquella puerta que lo llevaría a su principal destino.

Sin mencionar palabra alguna, el apodado J-Hope entró a aquella sala y tomó asiento. Ya la conocía, pero esta vez sabía que no era de la misma forma.

— Perdona mi falta de cortesía, pero... ¿Qué es lo que exactamente ocurre?— la intriga se apoderaba lentamente de aquél joven.

— Tengo sospechas sobre algo, o mejor dicho alguien— el rubio tomó asiento frente a Hoseok, mientras leía la carpeta de cartón.

— Cómo sé que es confidencial, sólo me limitaré a responder lo que preguntes— ante aquél joven, el comisario agradecía la clase de persona que era, pues facilitaba aún más su trabajo.

— Bueno... ¿Qué sabes de Owi?— el joven Park dejó a un lado la carpeta y se centró en el invitado.

— Pues... todo comienza con mi padre, ya que este era el encargado de desmantelar el nuevo grupo que se estaba introduciendo en la gran mafia y creaba terror en algunas zonas de la ciudad. Pero poco a poco se le fue saliendo de las manos, tanto, que aquella banda se extendió por el país— aclaró su garganta. —En su frustración de hacer algo, intentó realizar un atentado para el líder de la pequeña mafia, pero el afectado fue otro— Aquellas palabras fueron suficientes para saber el trágico final.

— Lo siento...— dijo Jimin con pena.

— No tienes porqué— la típica sonrisa del pelinaranja, apareció. —Mi madre murió cuando era pequeño, por eso, estuve al cuidado de mi abuela. Esta tenía una pequeña tienda de fragancias, por ende, muchas mujeres la visitaban. Un día, llegó una mujer muy bella, la cual no había ido por la misma razón que las demás, sino que fue por la petición que cuidara unas horas a su hija— el joven al ver tan sumergido al comisario, hizo una breve pausa para respirar.

— ¿Por qué te detienes?— se extrañó el rubio, pero al ver la posición en la que se encontraba, sólo rió y se acomodó.

— Prosigo... mi abuela al escuchar esto se negó, pero unos susurros y un fajo de billetes la hicieron cambiar de opinión. Yo aún no entendía, pero sabía que algo no estaba bien, por eso, mi tutora al ver mi intriga, me prohibió tener contacto con aquella niña. No pude comprender nada, hasta que... escuché una de las conversaciones de la pequeña con mi encargada— soltó un suspiro largo. —Esta mencionaba que Owi estaba buscando a su madre, pero esta tenía algo que hacer antes de regresar con él...— esto le dió a entender todo al joven Park.

— ¿Shanhal?— musitó.

— Si esa es la madre de Alee, creería que sí— el pelinaranja entrecerró los ojos intentando recordar algo. —Y otro dato, las mujeres que iban por las fragancias, eran la que trabajaban en el burdel, por eso siempre estuve enterado de lo que ocurría en el Infierno— terminó por añadir.

— ¿Y tú...— no terminó de preguntar el comisario.

— Murió hace dos años, aún así me sigo hospedando en aquella casa— sonrió nuevamente. —Digamos que es mi guarida— bromeó un poco.

— Esto que me acabas de decir es...— Jimin estaba impactado. —¡Fuerte!— fue lo único que pudo concluir.

— No estoy seguro de que si esto sirva o no, pero comencé a trabajar en el circo porque el Sr.Min siempre pasaba por la casa de mi abuela, hasta la saludaba— el comentario de Hoseok prendió una chispa en el rubio.

— ¿Desde cuando empezó a pasar por ahí?— el joven Park se refirió al fallecido.

— Desde...— el interrogado abrió los ojos en sorpresa. —Desde que ella fue a la casa— terminó la frase casi en un susurro.
















ESTO SE EMOCIONÓ XD





















ESTA ES LA ÚLTIMA ACTUALIZACIÓN DE ESTA SEMANA (NO ASEGURO NADA, DEPENDE DEL TIME)











WRITE U LATER....





SARANGHEO <3

CIRCUS //JIMSU//YOONMINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora