Más allá del silencio
tenue y agonizante,
más allá de nuestros sueños;
expandí mis brazos al aire,
a tu aire,
para intentar abrazar tu dulzura
o aferrarme a tu cintura.
Luego,
quise recuperar los besos,
tus besos,
tan efimeros y profundos
que ya apenas los recuerdo.
Quise explorar tu mundo,
un lugar frío y oscuro
por todos los daños
-que fueron más que años-.
ESTÁS LEYENDO
Museo de nuestras almas
PoetrySi te quedas a mi lado no quiero que seamos espectadores en una vida de bajo coste, quiero ser el protagonista de todas tus revoluciones.