En el fin del cuento
la mágica princesa
no besa su amado,
si no que le versa
sus mejores cantos,
y susurra sus sueños
para cumplir a su lado,
quiere parar el tiempo
para invitarlo a su caos,
y hacer de su desastre
otro mundo aparte,
lugar lleno de secretos
pero repleto del arte
y tempestad de amantes
que ansian encontrarse
y romper sus miedos.
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Museo de nuestras almas
PoetrySi te quedas a mi lado no quiero que seamos espectadores en una vida de bajo coste, quiero ser el protagonista de todas tus revoluciones.