Y vuelves a mí,
como un pájaro regresa a su nido,
como regresa a la escena del crimen el asesino.
No te cometeré otra vez, enemigo,
te apoderaste de mis oscuros sentidos
y cortastes todos los tenues hilos
que me mantenían firme y unido
al que era mi correcto camino.
Pero me he perdido,
no se a dónde he ido
ni en qué me ha convertido
este doloroso y amargo castigo
que camina siempre conmigo.
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Museo de nuestras almas
PoésieSi te quedas a mi lado no quiero que seamos espectadores en una vida de bajo coste, quiero ser el protagonista de todas tus revoluciones.