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Experiencias

Tony estaba recargado sobre el respaldo de su cama. Peter estaba acurrucado a su lado, completamente dormido. Había algunos hologramas flotando frente a sí, mientras mantenía una llamada telefónica con un manos libres.

-¿Tú hijo hizo eso?-Exclamó sorprendido.

Una risita se escuchó del otro lado de la línea.

-Sí, y solo tenía dos años.

-No sé cómo Romanoff ha soportado eso-Comentó Tony.

-Luce aterrador-Dijo Steph-, pero realmente es un amor con Johnny.

-Es más aterrador que digas eso de él-Stephanie rió-, la primera vez que me encontré con él salí corriendo del lugar-Dijo Tony medio en broma, medio enserio.

-Bueno, una vez lo conoces te llevas una agradable sorpresa.

-Se nota que lo aprecias mucho.

-De todos mis amigos, cuando perdí a mi esposo... Él... Nath ha sido...

Tony dejó lo que hacía y se concentró en la llamada.

-Ey-Musitó el genio-, no tienes que hablar de ello si aún no te sientes lista.

Stephanie suspiró. Guardó silencio unos segundos, agradeciendo lo comprensible que podía ser Stark.

-¿Qué hay de tu hijo? ¿Hay alguna experiencia que merezca ser contada?

Tony agradeció el cambio de tema, no era realmente bueno cuando de los sentimientos de otras personas se trataba; estaba seguro de no querer arruinarlo con esa mujer por no tener idea de cómo tratar situaciones delicadas.

-Oh, Peter es-Dio una mirada a su bebé, y sonrió inconscientemente-... Es el mejor niño del mundo, es lo mejor que pudo haberme pasado. Es un niño muy tierno, inteligente, cariñoso...

-Sin duda no se parece a ti -comentó la rubia con un tono risueño.

Tony rió por lo bajo, tratando de no despertar a Peter.

-¿Con esas vamos, señora Rogers?

-Tomando en cuenta cuando nos conocimos... Eres una pesadilla, Tony.

-¿Eso significa que sueñas conmigo?-soltó con tono insinuante.

-Yo no... Tú...

Tony ésta vez se carcajeó. Llevaba algún tiempo conociendo a la mujer fuera de cualquier labor, ya sea de padre o trabajo, y había descubierto lo poco tolerante que era a cosas tan simples como un coqueteo; para Tony era demasiado placentero ver sus reacciones, pero en este caso, imaginarlas.

-Tranquila, señora Rogers. Su secreto está a salvó conmigo.

-Qué considerado-masculló la rubia al otro lado de la línea, volviendo un poco a ser ella misma, luego de su bochornoso tartamudeo.

-Peter está enamorado de tí.

-¡¿Qué?!

-Sí, enserio te adora. Duró algunos días en las nubes cuando te conoció-Contó Tony-, admito que me sentí algo celoso.

Stephanie rió.

-¿Por qué?

-Bueno... Por mucho tiempo hemos sido sólo él y yo. Ambos éramos el centro de atención el uno del otro pero... Cuando conoció a tu hijo y luego a ti, el simplemente no dejaba de suspirar.

El silencio se instaló entre ambos durante varios segundos. Tony podía escuchar la suave respiración de la oficial, la cual le hacía fantasear un poquito sobre cómo se sentiría tenerla justo a lado.

-Johnny me ha dicho que quiere "un papá cómo lo tiene Peter".-soltó la rubia, pensando en que si Tony le había contado eso de su hijo, ella debía confesar un poquito de lo que estaba pasando con su propio hijo-Johnny actúa como un adolescente rebelde y... No puedo evitar pensar que... Le falta demasiado su padre-musitó al final, como si el aire se hubiera escapado de sus pulmones con esa confesión.

Tony sintió su estómago revolotear. Se sintió inquieto. Había estado saliendo con Stephanie hace un par de semanas y hasta entonces por su mente no había pasado el alcance que podrían tener sus acciones; simplemente vió la oportunidad de un buen ligue. O eso es lo que se decía a sí mismo.

-Creo que-Comenzó a titubear-, creo que... Johnny y Peter se llevan muy bien... Yo... Bueno... Quizás podríamos...-Tony carraspeó y se frotó su rostro con fastidio por estar tan inseguro en lo que diría-creo que podríamos salir juntos un día de estos.

De nuevo silencio.

-Tony.

-¿Sí?

-No tienes que preocuparte-La rubia suspiró-. Sabes... Es difícil hacerme cargo de Johnny porque... Sé cuánto extraña a su padre y... Y yo en ocasiones estoy tan concentrada en mi trabajo que no paso el tiempo suficiente con él...-la rubia cerró sus ojos un momento. Sentada en su pequeña salita junto al teléfono había pasado más de una hora. El reloj estaba por marcar la una de la mañana y ella solo podía sentirse expuesta, a pesar de que Tony no la estuviera mirando-Lamento... Lamento decirte todo esto, no es tu deber estar escuchando renegar un poco y...

-Ey-Interrumpió el genio-, compartimos experiencias, de eso se trataba esta llamada. No tienes qué disculparte.

Stephanie trató de detener la pequeña sonrisa que trataba de escapar de sus labios.

-¿Por qué eras tan insoportable al principio?

Tony soltó una carcajada como si con ella hubiera dejado salir toda la tensión de hace unos segundos. Se acomodó bien la enorme cama de su habitación y se abrazó al pequeño cuerpecito de su niño. El menor soltó un suspiro largo y una suave sonrisita de manera inconsciente.

-Bueno-Dijo él-, fuiste alguien fácil de molestar desde que te ví.

La conversación siguió por bastante tiempo. La noche pareció ser el momento perfecto para que la barrera de ambos cayera un poco más, sin que se dieran cuenta. Y sin darse cuenta, también sus heridas comenzaban a sanar.

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Capítulo cortito :/ lo sé...
He vuelto, por cierto. Resulta que en mi pueblucho se ha estado yendo la luz y la señal, y tampoco tenía datos, así que... ESTABA INCOMUNICADA!! Pero eso se acabó de momento :3 espero les haya gustado el cap.

Saluditos, lectores.

Becca.

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