Narrado por Christian
Esta noche a sido una de las peores en cuanto a peleas matrimoniales se trata, después de que mi esposa me regañara por ser un tonto con mi hermano, me ha dejado fuera, si literal Ana me saco de la habitación y me ha dejado en el cuarto de invitados, me siento un idiota y mi hermano ha decidido no tomar mis llamadas, se que se me paso la mano y ahora lo entiendo, Ana ha tenido una gran metáfora de esto, y si hubiera sido yo? ella dice que esta segura de que yo habría reaccionado igual si Elliot le hubiera llamado CASTRANTE a mi esposa, la verdad es que no se equivoca si el lo hubiera hecho me le hubiera ido encima, eso ha causado que mi arrepentimiento sea mayor y le he dado vueltas a la situación durante un buen rato pero por alguna razón no comprendo el porque no pude controlar mis comentario, DIOS GREY PARECES UN ADOLESCENTE. Lo se, un inmaduro crió de 14 años que no controla su lengua con unas cuantas copas. Apenas me acuesto en la cama me siento raro, aquella situación de paz y soledad que valoraba hace años ahora me resulta tremenda mente incomoda, el dormir sin Ana es como estar en una cama de roca, puedes dormir pero sera incomodo doloroso y en definitiva nada satisfactorio, me muevo de lado a lado del mullido colchon, golpeo las almohadas, jalo las mantas y trato hasta de contar borregos pero a pesar de todos mis intentos y de estar cansado, irritado y de querer terminar ya este día no puedo hacerlo, la imagen de mi esposa con su teléfono en mano pidiendo a su amiga una disculpa en mi nombre no me deja tranquilo, la mirada de Ana cuando esta enfadada es como un alfiler entre las uñas, DIABLOS QUE DUELE y a parte de todo esa mirada entra en la conciencia y te hace desquiciarte. Después de una media hora de no poder dormir decido que es hora de enfrentar a Elliot, llamo y llamo y dejo mensajes pero el no contesta el teléfono así que me voy al plan B, yo se como llegar a su casa, tomo algo de ropa y mis llaves para emprender mi nocturno viaje. Cuando llego a la cocina me encuentro con algo que no esperaba es mi pequeño Richard que no deja su costumbre de sacar jugos o cosas de la alacena y llevarlas a su habitación, Flyn me ha dicho que no lo regañe pero que le asegure siempre que en casa habrá comida para el.
- Hola papi.- Esconde en su bata el jugo que ha sacado y sospecho que algún paquete furtivo de galletas.
- Hola pequeño, que haces?
- Hemmmm me aseguro de que haya suficiente jugo de tomate para todos
- Bueno pues Gail ha hecho las compras hoy, así que hay suficiente
- Si.... emmm
- Tengo una idea, voy a poner un frigobar en tu habitación, lo llenaremos con lo que tu quieras y eso sera solo tuyo, ok?
- Si esa idea me gusta, puedo beber uno ahora.- No comprendo como le gusta, yo detesto el jugo de tomate igual que Ana y Tedy pero por alguna extraña razón el lo adora igual que mi bebita.
- Claro, pero ve a la cama ya, es hora de dormir
- y tu porque no duermes?.- Este niño tiene el carácter inquisitivo de mi cuñada y la ternura en el rostro de mi esposa para hacerme tantas preguntas como se le ocurre a su mentesita de bebe.
- Bueno pues yo iré a casa de tu tío Elliot
- Porque?
- He sido malo con el y quiero hablarle............. bueno pedir disculpas, resulta que nunca he tenido realmente que pedírselas, pero esta vez papa se equivoco y tiene que hacerlo
- Haaaaa es como cuando yo le tire jugo a Tedy, no quise hacerlo pero me di cuenta de que estaba hecho cuando lo vi llorar, enseguida me arrepenti y pedi disculpas, es justo así como te sientes papa?
- Si, justo así.- Creo que mi hijo comprende mas que nada estas cosas
- Bueno pues si debes pedir disculpas y no olvides llévale una paleta y darle un enorme abrazo, eso dice mama, un dulce y un abrazo hará que te perdone.- Me mira con inocencia y me entrega el paquete de galletas que lleva, dios mio mi hijo sabe mucho mas de esto que yo.- me iré a la cama, supongo que mama ira contigo.
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Familia Grey Kavanagh (segunda parte)
RomansaLa familia es una gran bendición y Elliot y Kate están felices con la familia que tienen los niños crecen las cosas irán bien, pero en algunos momentos ellos estarán en duda si han hecho bien en el rumbo que lleva la relación. Tendremos días buenos...