[Taehyung]
Todo marcha repentinamente bien, claro que he tenido lagunas pero no son de tristeza, son de sospechosa felicidad y simplemente no concibo la idea de que todo esté relativamente bien, no.
Me siento bien a pesar de todo, a pesar de tener a Arya rondando mis pensamientos, recorriéndolos casi en todo maldito momento, ni muerta puede dejarme en paz... ¿No le será cansado a su fantasma? Ya no quiero pensar en ella, pero es como si sólo siguiera ejecutándose en segundo plano y es algo intolerable, pero con lo cual he ido acostumbrándome, al igual que lo hago con este lugar, es maravilloso y esto crea un choque y conflicto interno aún más grande... No entiendo la sola idea de poder sentirme miserable por el recuerdo de un viejo fantasma y el estarme deleitando entre las calles parisinas junto a personas que son aún más increíbles que la idea de estar sintiendo gozo nuevamente.
Es extraño, pero simplemente pasa, como todo en esta vida, como aquel recuerdo que un segundo estaba lleno de vida y al siguiente se estaba marchitando frente a mis ojos.
Dejaré esto y tal vez también el modo automático y comience a ser conciente de todo esto, merece ser vivido, pero... ¿Yo lo merezco?
Otra noche en vela más y no sé si seré más ojeras que persona, pero siempre he tenido estos problemas del sueño. Y no se diga el hambre extrema que a veces siento. Simplemente estoy preparándome para otro día más, pero en piloto, tanto mi vida en realidad y dejando de privarme de los sentimientos tan bellos que esto conlleva. Quiero ir a aquella rosada cafetería con el chico de mirada de sable y risa chistosa, ver a un sol, a una persona talentosa y a aquella mariposa que está por emerger de una oruga que se está ocultando y avergonzando desde hace tiempo, al parecer. Quiero ayudarles y estar para ellos, pero primero tengo que estar para mi.
Saldré a dar un paseo, luego de un par de semanas aquí, ya puedo ubicarme un poco más y estar seguro de salir sólo con mi querida cámara.
- - - - - - - - - - - - - - - - - - - -
Entre tantas calles con edificios azul París, me encuentro nuevamente en la avenida más cercana al departamento, con estas tiendas para turistas y restaurantes que al parecer llevan varias décadas aquí. Cruzo la calle para ir a la linda plaza que Nam me mostró, ojalá pudiera subir a la rueda de la fortuna con alguno de los chicos o Giselle.
Tal vez sea hora de sacar una nueva colección....
- Hey, ¿qué haces ahí sin tomar fotos? - Volteo un tanto desconcertado y asustado, Nam estaba sosteniendo una bolsa ecológica llena con diferentes productos y media sonrisa en la cara -.
- Observando qué será lo mejor para retratar - Agarro la cámara y la subo un poco más de dónde cae gracias a la correa, casi a la altura del pecho - Sonríe y no te muevas.
- ¿Seguro que fui a lo mejor que pudiste fotografíar en todo este terreno? - Este hombre es muy atractivo, aún no entiendo porque se esconde detrás de esos lentes.
- Por supuesto, ¿te parece que bromeo? Es más, quiero otra toma y que te quites esos lentes, deja la bolsa a un lado y solo mírame. - Parece que le cuesta un poco despojarse de ellos, pero termina cediendo. - Muy bien, ahora sonríe o dame una pose, lo que tú quieras.
- ¿Está listo Tae? Debo volver con la abuela y preparar la cena.
- Por está ocasión, pero debes ser mi modelo para una sesión completa, ¿trato? -
- No prometo nada, pero daré lo mejor de mi. - Sonríe y se vuelve a poner las gafas. - Por cierto, Tae ¿podrías devolverme la bolsa?
- Claro, pero ¿no es muy temprano para cenar? - Le extiendo la bolsa sin soltarla -
- Sí, pero toda esta comida debe ser preparada y no lo haré yo. A la abuela le gusta tomarse su tiempo en la cocina. - Jalo un poco de la bolsa y la suelto. - Así que ya debería irme, amigo.
- Está bien, creo que regresaré contigo. - Me acerco un poco a él. - Hey, Nam, nunca te he preguntado, ¿de verdad necesitas utilizar esas gafas? No se ven con mucho aumento.
- En realidad no, sólo las debería utilizar para leer y esas cosas, pero ya sabes... - Mira sus pies.
- No, no sé. Pero bueno, si las usas sólo para leer no tendrás problema en volver sin ellas, ¿no? -
- Sí, no tendría problema. - Acomoda sus gafas.
- Entonces no te molestará prestármelas de regreso. - Extiendo la mano en señal de que me las de.
- ¿Para qué las querrías? - Da un paso atrás.
- Pues para verme interesante, yo también tengo unas pero no las utilizo, ¿me las prestas? - Sigo con el brazo tendido, esperando una respuesta.
- Está bien, pero debes devolverlas. - Se quita las gafas un poco indeciso, pero es genial, logré lo que quería.
- Claro, sino ¿Qué haría? ¿mudarme? - Suelto una risa un tanto baja y recibo las gafas, las pongo en el bolsillo de la camisa. - Bien, ahora podemos marcharnos.
Comenzamos nuestro camino hacia el edificio, entre charlas casuales y cortas, aunque el ambiente realmente se sintiera bastante tenso, como si hubieran muchas cosas que decir entre ambos y en verdad pienso que sí las hay, aunque no seré yo quien empiece a hablar de tema...
- Dime, Nam ¿has imagino como sería hablar con todos sin anteponer inseguridades y prejuicios?
- ¿Qué? ¿por qué preguntas eso? Creo que no tengo ningún prejuicio... - Siento más intensidad en el ambiente, al igual que incomodidad.
- En realidad, creo que todos tenemos alguno pero no somos completamente conscientes de ellos y algunos vienen de inseguridades. Para ser sincero, yo tenía y tengo mucho de ambas cosas. - Veo a mi compañero de reojo.
- Vamos, pero en realidad no pareces una persona pre-juiciosa. Pienso que eres alguien abierto a la charla y con gustos muy amplios y diversos. - Y vaya que tiene razón. -
- No discutiré mucho sobre eso, pero hay algo que debes saber sobre los prejuicios... - Dejo de caminar, estábamos casi en la entrada de nuestro edificio. - La mayoría de los prejuicios que tenemos, son sobre nosotros mismos. - Lo miro fijamente a los ojos y después desvío la mirada.
- Perdón, pero no entiendo. - Me mira con intriga, como si la respuesta fuera a estar en la tela de mi ropa.
- No quieres hablar con Jin, el chico de la cafetería porque temes al rechazo, ¿no? - Vuelvo a mirarlo a los ojos.
- Sí... Pero es diferente, él, un chico sofisticado seguro no quisiera entablar una conversación con alguien como yo, sin una identidad propia. - Baja la cabeza y al parecer su voz se quiebra ligeramente.
- Justo a eso me refiero, Nam. Crees que eres alguien sin identidad, alguien "sin estilo" y eso ante mis ojos, es una tontería, eres alguien auténtico, sólo te falta creerlo. Los prejuicios más dañinos son los que tenemos sobre nosotros mismos, ya que se reflejan sobre los demás y eso continúa alimentando a las inseguridades, es algo sobre lo que debemos trabajar y no sólo acostumbrarnos al dolor. - Mi amigo se quedó en silencio.
- Pensaré en ello, gracias. - Una respuesta casi automática, pero es bueno, espero que sí piense en ello. Tomo la bolsa con las compras y entro en el edificio. -
- Vamos Nam o la abuela se enfadará. -Grito desde la entrada de Louvre Montanna.
Notas de la autora:
Una eternidad más tarde.
Gracias por leer y si has esperado desde hace tiempo actualizaciones, aqui estoy jeje uwu
Espero poder ser constante con esto, los tqm.
ESTÁS LEYENDO
Louvre Montanna.
FanfictionHoseok y Gisselle son mejores amigos, juntos van a la "Acadèmie des Arts du Spectacle du Paris".Una academia especialista en artes escénicas. A un año de graduarse, llega un nuevo alumno que cambiará el rumbo de sus vidas académicas y ¿amorosas? Ent...