SIX

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27 de Noviembre. París, Francia.

[Hoseok]

- Genial, estuvo genial... Hemos mejorado mucho Bastian, ahora tenemos más oportunidades de ser seleccionados. - La emoción se nota en mi voz.

- Así es querido amigo, pude mejorar gracias a que me has revisado en los tiempos libres, de verdad te lo agradezco. - Me sonríe mientras se limpia el sudor.

Suena el timbre de salida.

- Bien, nos vemos luego Bastian, ¡suerte en pintura! - Digo mientras salgo del salón.

Me dirijo al edificio central, para ver a Gisselle, normalmente nos veíamos ahí antes del pequeño receso que tenemos entre clases. 

- ¡Hola Sunshine! - Dice alegremente mientras me saluda con la mano.

- Ah... Hola Gi - Intento actuar preocupado, no sé si el semestre de teatro de frutos.

- ¿Qué pasa? ¿No te gusta tu nuevo apodo? - Puedo ver la preocupación en su rostro. Lo logré.

- No es eso - Suspiro. - Debo irme después de la clase de canto - Hago notar la melancolía en mi voz y ojos.

- ¿Qué? ¿Pasó algo? - Me mira, su rostro está tan expresivo que seguramente le saldrán arrugas.

Bajo la mirada y tomo mi nuca, comienzo a reír escandalosamente.

- Caíste... Redondita. - Tapó mi boca mientras la señalo, burlándome de ella.

- Eres un imbécil Hoseok - Voltea los ojos mientras se aleja un paso de mi.

- ¿Y Sunshine? ¿dónde quedó? - Digo para fastidiarla.

- ... - La pausa y mirada que hacen aterrorizan un poco, pero sé que quiere reír.

- Espera, sólo espera. - Planto la duda en Gi.

- ¿Qué se supone que deba esperar? - Deja escapar la risa que estaba formada entre sus labios.

-Ya lo sabrás pequeño saltamontes. - Tomo a Gi por la muñeca y doy unos pasos atrás. - No digas nada, ¿ves al rubio bajito está por allá? - Señalo con la cabeza.

- Déjame adivinar, ¿quieres hablarle porque es el típico chico solitario que siempre ves? No te dejes engañar, en ballet y contemporáneo es muy cotizado.

- ¿Qué? ¿Realmente lo es? - Mi duda sobre esto chico incrementó, pues no transmitía la típica aura del chico popular.

- Es mi compañero de Pas de deux (padede) - Ríe de manera burlona- . Es el mejor en eso, las demás chicas siempre intentan convencerme de que intercambiemos compañeros. Se llama Jimin, por cierto.

- ¡Hey!  Gisselle, ¿sabes si tendremos ensayo por la tarde? - Se acerca el rubio a nosotros.

- No lo sé, la profesora no comentó nada después de la clase. - Se forma una duda en su rostro. -¿Por qué debería saberlo? - 

- Tal vez porque eres la favorita de la profesora. - Arquea una ceja, sonreía, al parecer quería molestarla.

- ¿De qué hablas? Ambos lo somos. - Comienzan a reír.

Incómodo, porque estoy fuera de la conversación, entro al campo de la sociabilidad.

- Eh... Sí, ¡hola!  Me llamo Hoseok, Jung Hoseok, Gisselle es mi mejor amiga... - Hago una pausa esperando una respuesta del rubio.

- Ah, lo siento. Mucho gusto Hoseok, soy Park Jimin, voy en algunas clases con Gisselle. - Responde algo avergonzado, lo cual hace que la ternura me invada-. 

Louvre Montanna.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora